lunes, 31 de enero de 2011

domingo, 30 de enero de 2011

Sé realista, pide lo imposible.


Ese era uno de los eslóganes del mayo francés, y no es tan absurdo como pueda parecer. Los niños piden todo y por todo lloran si no lo consiguen. El niño no sabe qué es posible o conveniente y qué no. Simplemente lo pide todo y los padres se encargarán de darle lo más que puedan para acallar su llanto. Es un problema del tipo agente-principal donde el niño es el principal, que manifiesta sus preferencias y el agente es el padre que tiene la información y los medios que le faltan al principal. No descubro nada nuevo. Ya lo decía hace mucho el refrán: "El que no llora no mama".

Hay más ejemplos diarios, como el de la mujer que pide al hombre la luna para, por lo menos, que le dé un hogar o el hombre que le pide a la mujer que le haga un pan para, por lo menos, tener buenas tortas. Sí, he puesto ejemplos estereotipados, la razón es que en ellos se ilustra mejor el problema. En las relaciones menos estereotipadas debería primar otro modelo de relación, con más coordinación de preferencias y mejor reparto de la información.

Pondré dos ejemplos más:

1. Los sindicatos se aferran a no cambiar, o cambiar lo menos posible, el sistema de pensiones. Dentro de unos años habrá el doble de pensionistas, así que no cambiar algo es imposible. Pero una defensa numantina contra el cambio tal vez obligue al gobierno a hacer esfuerzos adicionales para sacar recursos de donde, con sindicatos más condescendientes, tal vez no se plantearía meterse. Si ahora gastamos 100 en pensiones, dentro de poco harán falta 200. Poniendo más impuestos a los ricos o haciendo cotizar más a las rentas más altas tal vez se puedan sacar 10. Lejos de los 100 que harían falta, pero mejor que nada.

2. Las sociedades de gestión de los derechos de autor y algunos de los pocos autores que ganan cantidades sustanciales con el monopolio intelectual defienden a capa y espada la limitación de las copias y los cánones a pesar de que esto supone una merma de eficiencia en la promoción de las obras. La producción nunca se ha limitado por la copia ni ha aumentado por extender el monopolio intelectual. La distribución, en cambio, sí se limita con las prohibiciones. El mercado informático se distorsiona con los cánones y la libertad se restringe con la invasión de la privacidad. Aunque no lo sepan, lo que están haciendo con esta defensa de su monopolio es presionar al gobierno a que se les compense de la manera que sea: con más subvenciones a los conciertos, con más premios literarios,.... o con más cánones y leyes Sinde si el gobierno sigue sin entender de qué va la movida.

Yo tiendo a ser condescendiente con el papel de llorones de los niños o de pedidores de lo imposible de sindicatos y de autores. Pero si un Vicenç Navarro o un Fernando Savater intentan decir que lo suyo es análisis racional yo debo decir que nones, que lo suyo sigue siendo llorar para mamar.

¿Acaso alguien ve aquí una manera de doblar el dinero para las pensiones? ¿O aquí una demostración de que la copia impide la creación? ¿No son más bien apelaciones a nuestros sentimientos, como hacen los bebés llorones?

miércoles, 26 de enero de 2011

Es que lo tengo que hacer yo todo.


Durante los primeros años de la revolución cubana Fidel Castro solía coger un jeep para recorrer la isla. En sus viajes daba órdenes sobre cómo hacerlo todo, desde dónde poner una escuela hasta cómo plantar la cosecha.

Este proceder tuvo dos consecuencias. La primera, obvia, que muchas de las órdenes carecían de sentido y eran ineficientes. La segunda, más sutil, es de mayor calado. Nadie se atrevía a hacer nada hasta que no llegara Fidel con su séquito. Los errores se enmiendan y de ellos se aprende, pero de la falta de iniciativa no hay nada que aprender y conduce al equilibrio que llevan sufriendo los cubanos durante medio siglo.

Ese equilibrio es muy vicioso. Como nadie hace nada, el dirigente cree que lo tiene que hacer todo y como el dirigente lo manda todo, nadie tiene incentivo a hacer nada. Sé que es una gran simplificación, pero este mecanismo ofrece una explicación clara y sencilla de muchas cosas observadas.

La revolución cubana es solo un ejemplo. Todos conocemos padres que ordenan el más mínimo aspecto de la vida de sus hijos, personas que creen que tienen que ocuparse de toda la intendencia de su pareja o jefes incapaces de delegar en los demás. Esta actitud, además de no incentivar la participación de la otra parte, puede tener por consecuencia que esa otra parte, además de no tener incentivo a hacer nada, lo que es malo, no acabe de aprender a hacer las cosas, lo que sería peor.

Con todo, esto último me parece que ocurre las menos de las veces. A menudo sucede que la dictadura se acaba, el hijo se va de casa, la pareja se separa y el jefe se retira y a menudo en estos casos el gran dirigente, los padres, el cónyuge y el jefe se sorprenden que su tutelado sea capaz de valerse por sí mismo.

Todo por no entender lo que es un equilibrio.

domingo, 23 de enero de 2011

Suicidio homeopático


Se está organizando un suicidio homeopático para el próximo 5 de febrero. A vueltas con el tema con mis compañeros arpíos, me salió lo siguiente.

Hay que tener claro a quién va dirigido cada argumento y cada acción. El suicidio homeopático solo puede ir dirigido al público en general. Se trata de hacer saber que los preparados homeopáticos no tienen nada, pero nada de nada (fuera del excipiente, claro). Mucha gente no sabe eso.

Algunos tal vez se dejen convencer por las justificaciones de los homeópatas, pero entre la gente que ahora no sabe lo que es la homeopatía y que podría entender que son preparados naturales de plantas o que estaría dispuesta a aceptar que dosis pequeñas curan (en plan vacuna), la mayoría empezaría a ver raro lo de la memoria del agua. A hablar de tonterías cada vez mayores es a lo que podemos forzar con este tipo de acciones.

Por supuesto, siempre está la respuesta de que no sabemos por qué es, pero cura. Cuando alguien me dice esto, siempre le pregunto si cree en algo en lo que sé que no cree, por ejemplo en que rezar cura. Cuando me dice que no cree en eso, le digo que su justificación para sostener la homeopatía tiene que ser distinta de la que me podría dar el que cree que rezar cura. Es decir, que no vale el "a mucha gente le vale".

A los homeópatas, solo queda retarles a que acepten hacer experimentos de triple ciego con todos los protocolos y garantías. Como hay 4.000 (como poco) preparados homeopáticos y hay cientos de dolencias, eso quiere decir que debería haber decenas de miles de estudios (tal combinación de preparados para tal combinación de dolencias, véanse estas recomendaciones a los suicidas) con sus repeticiones y validaciones. Incluso más importante que eso, debería haber documentadas muchas líneas de investigación que no llevaron a ninguna parte.

Vamos, que hagan lo que se hace, o por lo menos se intenta, en medicina. Sacar que una vez un estudio sin demasiado rigor dio algo por encima del placebo para un preparado particular queda muy lejos de eso.

Y a las autoridades, hay que instarlas a que no acepten de la homeopatía nada sin los rigores pedidos para aceptarlo de la medicina.

miércoles, 19 de enero de 2011

La ortografía que viene


Hace poco, las academias de la lengua española sacaron la nueva ortografía. No voy comentarla con ningún detalle, solo constataré el hecho de que la ortografía española tiene demasiado enraizado un principio loable pero imposible, la correspondencia fonética.

El tener una lengua cuya escritura es fonética representa unas indudables ventajas, sobre todo para los escolares cuando la aprenden. Los chinos tardan muchos años en dominar su escritura y si los anglohablantes tienen concursos de deletrear (casi impensables en la lengua española) es porque reconocen su dificultad en este tema.

Me parecen bien todas las simplificaciones hechas (a ver cuándo suprimimos los acentos), pero hay una parte de la nueva ortografía que me parece una batalla perdida, y para bien.

Hasta hace poco, era posible transcribir palabras extranjeras a la fonética española y deletrearlas según ella (como fútbol) o al revés, traer la palabra escrita como se escribía en la lengua extranjera y pronunciarla como se leería si fuera española (como garage).

Esto empieza a ser difícil de mantener. Las nuevas palabras vienen en gran cantidad, de distintas lenguas y de manera demasiado conspicua, tanto en su escritura como en su pronunciación según la lengua de la que llega, todo debido a la profusión de los medios de comunicación modernos. ¿Alguien dejará de escribir software para escribir softgüer? ¿Alguien dejará de pronunciar softgüer para pronunciar softguare?

Ningún académico piensa que Qatar se escribirá Catar, parece que solo lo recomiendan como quien dijera: “haced lo que queráis, pero habíamos dicho que queríamos una escritura fonética según nuestras reglas y nos pagáis para que os lo recordemos”. Por lo menos, en lo tocante a topónimos soy partidario de dejarlos como están en la lengua original, si es de alfabeto latino, y usar la transliteración internacional si usa otro sistema. Esto es lo que está ocurriendo ya. Solo propongo hacerlo oficial.

Hace mucho que Aquisgrán dejó de ser Aquisgrán para ser Aachen. A Amberes le queda poco para ser definitivamente Antwerpen y lo mismo a Pekín para ser Beijing, pronunciado sin jota alguna. Me parece de perlas tener un solo nombre para Girona (otra vez sin pronunciar la “g” como jota) y también uno solo para Zaragoza (nada de Saragossa en los letreros de las autopistas catalanas). Seville dejará su lugar a Sevilla en los mapas ingleses. Nueva York y Londres resistirán unos cuantos años más, pero acabarán cayendo para ser New York y London. Lo primero ya lo dicen muchos hispanohablantes, y no por pedantes.

Por lo menos en los topónimos podemos toda la humanidad funcionar como una sola lengua.

lunes, 17 de enero de 2011

Más errores de Vicenç Navarro


Me advierte Hugo de algunos números que se hace Vicenç Navarro. Me resulta curioso que personas que piden credenciales y documentación científica antes de opinar para discernir ciencia de pseudociencia, luego no hagan lo mismo con la economía. Si dedico tiempo a hablar de este caso es porque Navarro parece tener bastante predicamento entre gente que tengo por inteligente y a la que respeto muchísimo. Vicenç Navarro es un académico muy citado por sus publicaciones en el campo de la sociología. Yo no le conozco publicaciones en revistas académicas de economía. Incluso cuando se rodea de economistas, no son gente que tenga publicaciones relevantes. Cualquiera de los del manifiesto de los 100 tiene más publicaciones en revistas de economía importantes que las que pueda juntar Navarro con todos sus colaboradores.

Navarro nunca responde a los estudios publicados con otros estudios publicados, sólo escribe artículos de prensa como respuesta al famosos manifiesto de los 100 o a las intervenciones en los medios de alguno de los promotores del manifiesto. Y lo hace con trampa.

Aquí, por ejemplo, señala que no hace falta aumentar la edad de jubilación porque, si bien es verdad que dentro de poco la población retirada se multiplicará por dos, la población que trabaja también aumentará. El propio Navarro reconoce que, en el mejor de los casos, pasaremos de una tasa de ocupación del 60% a una del 70-75%. A mi me gustaría mucho que fuera así, pero no apostaría el futuro de las pensiones a que vaya a ser así. Pero lo más importante es que un aumento del 60% al 75% está lejos de doblar el número de cotizantes para mantener la ratio de cotizantes por pensionistas. Navarro se calla este detalle. Las tasas de incremento de natalidad o de incrementos de inmigrantes para mantener la ratio son completamente inverosímiles. Deberían casi doblar la población española en los próximos años para mantener la ratio de cotizantes sobre pensionistas.

Aquí se hace otras cuentas. Dice que el número de años de incremento de vida como pensionistas es de 2,3 años y no de 4 como se suele decir. Así todo es un aumento de la cantidad de años en la jubilación, así que, si todo lo demás se mantiene (cotizaciones, productividad, población,...) habrá que cobrar menos de jubilación como proporción del salario. Si queremos mantener la proporción habrá que cotizar más.

Da la impresión que Navarro comente una falacia de composición: como cada una de las cosas que ocurren no es suficiente para pedir una reforma de las pensiones (p.e., podemos aumentar los impuestos a los ricos o apelar a la mayor productividad futura para dar cuenta de esos 2,3 años de más), la suma de todas las circunstancias que concurren tampoco lo es. Aquí explicaba algunas cosas más.

Está bien hacer cuentas, pero hay que hacerse todas las cuentas, y llegar hasta el final con ellas. Si no, es trampa.

jueves, 13 de enero de 2011

Entrevista a Arcadi Espada, director de Ibercrea



He escuchado la entrevista a Arcadi Espada que se ha emitido esta tarde a las 19:00 en El Ojo Crítico de Radio Nacional de España.

Arcadi Espada fue nombrado a principios del pasado diciembre director de Ibercrea, un instituto de defensa del monopolio intelectual, que agrupa a las compañías que gestionan los derechos de autor, entre ellas, la SGAE. Conscientes de la mala prensa que han acumulado en los últimos tiempos, estas agencias quieren explicarse y quieren estar presentes en los debates sociales.

Mi impresión, tras oír a Arcadi Espada es que no han podido plantearlo peor, ni elegir a un peor comunicador o argumentador. Como comunicador, Arcadi Espada es nefasto, por lo menos en este tema. Una cosa es estar convencido de que uno tiene razón y no tener pelos en la lengua a la hora de defender la postura propia y otra cosa es llamar populacho y parásitos a los que no están de acuerdo con uno. Eso es exactamente lo que ha hecho Arcadi.

Podía, tal vez, referirse a una parte de los que no piensan como él y que sí insultan (supongo que los habrá), pero nada en su entrevista hacía entrever eso. Cualquiera que opina que copiar no es robar o que uno de los problemas actuales de la creación intelectual es la falta de visión de muchos de los actores involucrados le merece, a lo que se ve, esta consideración a Arcadi.

Como argumentador, por lo menos en la entrevista, no ha mostrado ninguna carta. Todo su relato, aparte de los insultos anteriores, ha sido establecer analogías entre la propiedad privada de un objeto y el derecho de monopolio sobre las copias de una obra que son propiedad de terceras personas. Luego han estado las consabidas confusiones que he tratado en otra entrada. A esas hay que añadir el que Arcadi parece pensar que insistir en que el mundo editorial (su volumen, su peso, su estructura, su actividad,...) no puede ser el mismo hoy día, con las nuevas tecnologías, que lo que ha sido hasta ahora es despreciar la labor del editor. Otro non sequitur o mantra que espero nadie se lo crea por mucho que se lo repitan.

Le preguntaron a Arcadi por el artículo de Amador Savater en el País. No se dignó a contrastar argumentos. Ni Amador Savater, ni Rodríguez Ibarra, ni otros muchos que han escrito en contra del monopolio intelectual (yo, modestamente, incluido) han usado el insulto y sí han presentado argumentos que deben ser rebatidos si se quiere tener razón.

Pero no, los Arcadi Espada y Teddy Bautistas van por la vida sin pensar en ningún momento que tal vez, en algún aspecto, por pequeño que sea, no tengan razón y que tal vez alguno de los que no opina como ellos no sea un populacho o un parásito y tenga, en cambio, algo relevante que decir.

Alex de la Iglesia, por lo menos, no hace esas cosas.

lunes, 10 de enero de 2011

La nueva tregua de ETA


ETA anuncia un alto el fuego permanente, general y verificable. El comunicado es breve y no se mete en ningún detalle de lo que significa cada una de las cosas que se dice, así que todavía barrunto mucho camino por delante. Es posible que sea otra tregua trampa, pero también es posible que sea la definitiva. Mientras que no se hagan concesiones merecerá trabajar en la posibilidad segunda. Al fin y al cabo, si algún día ETA decide disolverse la cosa empezará con este tipo de acciones.

No veo problemas en las verificaciones ni en la entrega de armas, que son cosas perfectamente negociables por ambas partes y en cuyos detalles no era necesario entrar todavía.

Me preocupa más la insistencia en las claves de territorialidad y autodeterminación. Espero que no sea más que un recurso retórico de cara a la galería.

Hoy día no hay problemas territoriales de importancia relacionados con Euskadi-Euskal Herria-Navarra. Dos tercios de los navarros no quieren la incorporación a Euskadi. El único problema sería la coordinación de políticas sociales, lingüísiticas, culturales,... de la parte vasca de Navarra. En el País Vasco francés tampoco hay más problema territorial que la reivindicación de un departamento propio. Las únicas reivindicaciones territoriales no satisfechas son las hechas por los habitantes de Treviño para su incorporación a Álava y la de Villaverde de Trucios para su incorporación a Bizkaia. Nada de lo anterior se resuelve a tiros.

Sobre la autodeterminación hablé aquí. Hasta que no haya una mayoría del parlamento vasco que pida la independencia y esta se niegue por parte del gobierno español no habrá ningún conflicto tampoco. Cualquier manera de no ser independiente no puede ser decidida unilateralmente por ninguna de las partes, como parece que a veces se entiende por autodeterminación.

En cualquier caso, hoy es un día más alegre que ayer. Esperemos que no se frustre.

viernes, 7 de enero de 2011

De católicos


Hace un par de semanas Citoyen hizo una reflexión sobre la manera de ser católicos en Francia y en España. El geógrafo subjetivo dedicó otra entrada al tema y aprovecho su resumen de la entrada de Citoyen para reproducirla aquí:
"La diferencia que él observaba, y que muchos observamos, entre los católicos franceses y los católicos es que para los primeros ser católicos es algo serio y que se refleja en la cotidianidad de sus vidas, mientras que para los segundos ser católicos era algo que poco o nada condicionaba sus vidas que eran difícilmente discernibles de las vidas de los expresamente no profesan ninguna religión."
Esto es lo que me sugirió el tema:

Habrá que investigar más para ver si es cierto que la diferencia es esa. Podría ser que en Francia hubiera un 20% de católicos serios en sus creencias y en España un 50% de católicos a la carta y un 20% de católicos serios. La percepción sería que la media es menos seria en España.

A mí me parece bien todo lo que ayude a desterrar la mentira organizada que es la religión. Una religión no se define por su moral, que pueden compartir varias religiones e incluso filosofías humanistas, sino por sus mentiras.

En esto tengo, sin embargo, un conflicto. Por una parte el estado moderno exige una separación clara entre Estado y religión y una laicidad y aconfesionalidad sin concesiones. Por otra parte no puedo por menos que constatar que el haber convertido a los curas en funcionarios los ha aborregado con tanto éxito que su capacidad de trabajar por sus ideas y buscarse la vida para conseguir clientela es bastante pobre. Eso que ganamos.

Tal vez la cuestión sea si la religión desaparecerá porque cada vez la practican menos (acaso Francia) o porque los que la practican lo hacen con menos intensidad (acaso España).

martes, 4 de enero de 2011

Los Reyes Magos


El 21 de septiembre de 1897 una niña le preguntó al director del New York Sun si existía Santa Claus. La respuesta hizo historia. En diciembre de 1997 un lector no satisfecho con las ambigüedades y evasivas del director, le pasa la pregunta a Cecil Adams, el ser humano más sabio, según reconoce él mismo. Traduzco su respuesta, pero adaptada a los Reyes Magos, ya que la ocasión queda bien traída. 

“Digamos que su existencia no puede ser definitivamente descartada.

“No digo que no haya aspectos improbables en la historia. Tenemos un número x de niños (incluso si dejamos fuera los no católicos), un lapso de tiempo y por visita, una distancia media de z entre domicilios y 24 horas en el día. No cuadra. Además tenemos el problema de acceder a las casas, a no ser que admitamos que los reyes pasan por la cerradura de la puerta como la criatura de la película El Abismo, no una imagen especialmente festiva. Luego está el problema de abastecimiento de los reyes en no se sabe qué factorías dedicadas a la producción de los regalos y que no han sido detectadas por los satélites y que no producen emisiones detectables.

“Por otro lado, consideremos lo siguiente:
  • Demasiado a menudo ocurren hechos improbables. España se apunta a la civilización sin humos y somos campeones del mundo en fútbol. ¿Qué es eso comparado con el reparto preciso de millones de paquetes en una sola noche?
  • Además, existen Correos y las empresas de transporte. Así que ¿qué más da si estamos hablando de empleados en lugar de camellos? Lo que importa es el concepto.
  • Vale, estamos reconociendo que hay algo de participación no mágica en todo esto. Tal vez, como padre o madre tú misme hayas hecho algo de tu parte para ayudar a los Reyes Magos y has pensado que era cosa tuya. Las hormigas en el hormiguero probablemente piensan que actúan también según su voluntad. Estudiando el asunto con objetividad no podemos negar que haya en acción un propósito más grande y que estemos al servicio de una agencia mayor que nosotros mismos.
  • Estás hablando de la Agencia Tributaria.
  • Estoy hablando del impulso de ser generosos. Trescientos sesenta y cuatro días al año la humanidad comete toda suerte de actos horrendos. El día trescientos sesenta y cinco damos regalos a los niños. No es para decir que esto último compense lo anterior. Pero, vamos, contará para algo. El hacer regalos de manera que el mérito se lo llevan otros es suficientemente ajeno al nuestro comportamiento usual como para que cuente como un misterio, y bien podemos dar nombre a ese misterio. Sea Reyes Magos.
  • Además, creer en los Reyes Magos es creer en magia. La creencia en magia, en muchos aspectos es perniciosa. Por ello tenemos multitudes convencidas de haber sido secuestradas por extraterrestres, de que Elvis está vivo, de que se puede ganar dinero rellenando sobres en casa, de que el telepredicador te puede sanar si le mandas 50 euros. Cierto tipo de gente, al que pertenece vuestro columnista, va por la vida intentando eliminar tanta tontería. No hay duda de que en lo principal estamos haciendo algo bueno. Pero incluso el más estricto de nosotros recuerda la ilusión que sentíamos de niños al pensar que había una fuerza que tenía un interés en nosotros y que no estaba sujeta a las reglas de este mundo. Así que si alguien ha de decir tajantemente que los Reyes Magos no existen, no seré yo.”

domingo, 2 de enero de 2011

Un poco más limpios


Con retraso, pero por fin nos enganchamos a la sensatez de los espacios libres de humo. Ha habido mucha discusión al respecto, pero, curiosamente, poco contraste empírico. Que si es un atentado a la libertad, que si la mala educación de los fumadores, que si el paternalismo estatal, que si las consecuencias para la salud,...

Discutir está muy bien, a mi me pone como a cualquiera una buena discusión. Pero si queremos saber las consecuencias de la prohibición del humo en lugares públicos no tenemos más que echar un vistazo a los países donde nos llevan ventaja. Y la realidad es que en todos ellos no fumadores y fumadores están (siempre hablando en términos generales) mejor según su propia apreciación. Spain is not different. Los españoles fumadores que van durante una temporada a los EEUU (y hablo de este caso porque es el que conozco) reconocen la bondad de la legislación que les impide fumar en lugares públicos. Ninguna encuesta en ningún país con esta prohibición indica que haya nostalgia alguna por los viejos tiempos de tolerancia mal entendida.

En principio parecía que la separación entre lugares de fumadores y no fumadores podría haber resultado. No fue el caso. Uno puede aventurar que la razón es la misma por la que no funcionó en su momento el tener cines para fumadores y no fumadores o centros comerciales de uno u otro tipo. Siendo lugares públicos y siendo el público no individual, sino grupos de individuos, en su mayor parte, una separación de los lugares para fumadores y no fumadores implicaba obligar a negociaciones a los grupos de individuos (familias, cuadrillas de amigos, compañeros de trabajo,...) y a conciliar estas con las decisiones de los dueños de locales. Tales negociaciones, que entendemos difíciles sino imposibles, para los casos de los cines, se han mostrado también difíciles en el sector hostelero. De ahí la necesidad de una regla general y que esta sea la más favorable a la inmensa mayoría de no fumadores y fumadores (los que quieren fumar, pero no quieren un ambiente lleno de humo).

¿Tendrá éxito la norma? Lo iremos viendo a partir de hoy. Soy optimista. Reglas claras son más fáciles de cumplir que reglas que dejan grados de arbitrariedad. Además, ahora el poder de negociación y el  equilibrio que corresponde a un punto focal están del lado de los que prefieren el espacio libre de humos. Para entender esto último recomiendo la entrada de mi colega Marco Celentani en el blog Nada es gratis.

Ahora toca ir contra el ruido y contra el excesivo número de coches en los centros de las ciudades y de algunos barrios, y contra la suciedad en las calles y la contaminación atmosférica, y las emisiones de CO2,...

Salud.