domingo, 18 de octubre de 2009

Concierto para vascos. Segundo movimiento.

El Concierto Económico Vasco tiene su origen en 1876, con la abolición de los fueros tras la tercera guerra carlista. Recordemos que España, como muchos países europeos, se formó con la unión de distintos territorios más o menos independientes legados tras la larga historia medieval. España se unió antes que la mayoría de los países europeos, lo que no quiere decir que superara las tensiones territoriales antes.

Aquí y allá algunos pueblos se sentían, con o sin razón, más o menos favorecidos en el proceso. Algunos territorios se unieron por conquista, otros lo hicieron de buena gana, otros se unieron en el entendimiento de que se respetaba cierta autonomía. La historia es larga. Lo que hoy es la Comunidad Autónoma Vasca perteneció la mayor parte del tiempo a la Corona de Castilla, como territorios cuyas leyes debía jurar el rey castellano. Esta situación era cómoda para ambas partes. Los vascos estaban a gusto en ella. Su entendimiento era que pertenecerían a la Corona de Castilla mientras se respetaran sus fueros. Navarra, por el contrario, fue conquistada (y no toda) en 1512. Con todo, a pesar de perder esa guerra, se le permitió conservar también algunas de sus leyes.

El siglo 19 fue el siglo en que se intentaron llevar a la práctica política las ideas de la Ilustración, de la razón y el siglo que vio el nacimiento del liberalismo político y económico. La convivencia en un territorio de distintas leyes y de aduanas internas suponía una rémora al desarrollo. Las teorías modernas del Estado requerían una unificación territorial y de derechos. Estos procesos pueden hacerse por las buenas o por las bravas. En Francia se hizo por las bravas, con una Revolución. Salió bien, porque tras ella se impuso un ideal republicano que consiguió el apoyo mayoritario de la población. Los respetos a los derechos individuales y la educación universal prevalecieron sobre los derechos asociados a los territorios o a los estamentos sociales.

En comparación, el caso del Reino Unido se hizo algo más por las buenas, con las distintas Acts of Union, aunque en el caso de Irlanda se empezó con mal pie, al no dejar que los católicos pudieran estar en el parlamento. Aunque la cosa fue mejorando, el daño ya estaba hecho.

En España hubo líos desde el comienzo. Primero con la invasión francesa y luego con las guerras carlistas. Perdieron los carlistas tres veces, se derogaron los fueros y se volvieron a recuperar para derogarse definitivamente tras la última de las guerras, pero el temor a nuevas confrontaciones hizo que se mantuviera algo de autogobierno, en forma de Concierto Económico.

No es que los carlistas fueran nacionalistas, sino que eran tradicionalistas y encontraron apoyo entre quienes pensaban que la pérdida de sus fueros suponía una merma de sus libertades. Algo de razón no les faltaba, en el campo del País Vasco y Navarra, y en general en el norte y el levante, la pérdida de la libertad de testar, por poner un ejemplo, ponía en peligro el sistema de explotación tradicional, al tener que dividir la poca tierra entre todos los hijos. En las ciudades no se percibían este tipo de problemas y nunca fueron carlistas.

En contra de lo que pasaba en Francia, no hubo un ideal republicano al que agarrarse. En contra de lo que pasaba en el Reino Unido, no hubo un acuerdo de unión, sino uniones por matrimonio real, invasiones napoleónicas, guerras y conquistas (por no hablar de la independencia de las colonias americanas). En suma, tuvimos un siglo 19 demasiado inestable y una ausencia de ideal común como en Francia o en el Reino Unido. Aprovechando algo del espíritu unificador tras la experiencia de la guerra de independencia y con algo de tiempo las cosas podían haber empezado a funcionar, y en la mayor parte del país así fue, aunque con bastante frustración tras la derogación de la constitución liberal. En el País Vasco y Cataluña la centralización se percibía de otra manera por parte de la población. Tampoco es el único país donde las cosas no se hicieron bien por esas épocas. La independencia de Bélgica con los flamencos un tanto ninguneados es otro ejemplo. Tenemos ejemplos más recientes en los países formados tras la disolución de los imperios Austro-Húngaro y Otomano.

El cambio de siglo, sumando ciertas tendencias románticas a incomodidades históricas, llevó el nacionalismo al País Vasco, Cataluña y a Galicia. Los excesos verbales de Sabino Arana cuajaron bastante en el País Vasco (afortunadamente se fue apartando el tinte racista de aquella nulidad intelectual de hombre). La frágil figura y sentida prosa de Castelao impregnaron mucho el pensamiento galleguista, pero sin canalizarlo en una formación política mayoritaria.

Y así llegamos a la Guerra Civil. A un grupo de militares se les ocurrió que la manera de evitar los excesos, a veces criminales, de algunos grupos políticos en la Segunda República no era ganando las elecciones a un gobierno acaso débil y tolerante con esos grupos, sino encabezar una rebelión, hacer una guerra que causó cientos de miles de muertos y exiliados y tener al país atenazado durante cuarenta años de dictadura (¡y hay políticos en activo que dicen que mereció la pena!). Tras la guerra, Franco declaró a Bizkaia y Gipuzkoa provincias traidoras y derogó sus conciertos, que se mantuvieron en Araba y en Navarra. Tras cuarenta años de dictadura, con la democracia se devolvió el Concierto a esas provincias.

16 comentarios:

  1. Un poco de perspectiva historica nunca viene mal

    ResponderEliminar
  2. El siglo 19, no, se´ra el siglo XIX que sí es del liberalismo, pero no de la Ilustración, que es el XVIII (no el 18)

    ResponderEliminar
  3. Anónimo:

    Gracias por la corrección. Aunque la Ilustración es un fenómeno extendido en el tiempo, efectivamente es al siglo 18 al que se le llama el siglo de la Ilustración. Su efectos se dejaron ver tras la Revolución Francesa, la independencia de los EEUU y la Revolución Industrial, que nos colocan ya en el 19 (he dicho "tras").

    En castellano se ponen los siglos en romanos. Me gusta más ponerlos en arábigos. Una práctica que quisiera extender. Es por adelantarme a cuando lleguemos a siglos como el 548. ¿Los seguiremos escribiendo en números romanos? Eliminamos esta práctica de los años. Propongo eliminarla de los siglos.

    ResponderEliminar
  4. ¡¡¡Falso!!!
    Los militares que se rebelaron en 1936 no pretendían "tener al país atenazado durante cuarenta años de dictadura", sino indefinidamente.

    ResponderEliminar
  5. Vaya, más correcciones. No doy abasto.

    Jesús: En mi defensa fíjate que he dicho "que tuvo como consecuencia..." Pero tienes razón, no llegaron a hablar de los mil años del Tercer Reich, pero poco les faltó. El destino en lo universal suena también a destino eterno. Al fin y al cabo, el universo tiene espacio y tiempo.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Jesús Zamora: En 1936 no se levantaron sólo militares. Fue un levantamiento de militares y civiles voluntarios. Es más, el 18 de julio había más civiles que militares levantados, con lo cual puede decirse sin temor a equivocarse que fue un levantamiento popular.

    El franquismo fue posterior (de 1937).

    Al blogger: Veo que escribe usted de forma prudente sobre los fenómenos de los s. XIX y XX y eso es bueno.

    Eso sí, lo que no es muy conocido, principalmente porque se oculta sistemáticamente en los manuales escolares, es que los carlistas se pronunciaron tres veces, pero es que los liberales hicieron dieciesiete pronunciamientos con sus espadones.

    ResponderEliminar
  7. Hola, Perlimplín, bienvenido al blog.

    No entiendo tu empeño en dar un lavado de cara a actos inconstitucionales por el hecho de que haya civiles involucrados ¿Qué es un levantamiento popular? Unos miles de civiles exaltados que prefieren dar un golpe de estado y causar una guerra antes que ganar unas elecciones no son "el pueblo". ¿Fue la revuelta de Asturias "popular" sin temor a equivocarse? En el intento de golpe de Tejero había civiles involucrados, ¿fue un levantamiento popular sin temor a equivocarse? Los etarras son todos civiles (a no ser que reconozcamos como ejército a ETA) ¿decimos que practican levantamientos populares sin temor a equivocarnos? La adscripción civil o militar de los involucrados en prácticas antidemocráticas e inconstitucionales no legitima ningún crimen.

    Los que pretendieron el golpe de estado causaron la guerra y la dictadura. Tal vez alguno no quería, pero esto es argumento bastante pobre.

    En cuanto a la lista de pronunciamientos, puede el lector seguirla en cualquier manual de historia. He recogido en la entrada lo que me parecía más relevante para entender el estado de la cuestión sobre el tema del Concierto Económico Vasco. Para eso, las "carlistadas" tienen mucha más relevancia que otros aspectos de la historia del siglo 19, pero estoy dispuesto a oír otras interpretaciones.

    ResponderEliminar
  8. Esto es lo que pasa cuando se desvia el tema del articulo para dar puntillas totalmente gratuitas y fuera de lugar sobre la guerra civil. En la guerra civil se enfrentaron dos grandes bandos que tenian ideologias contrapuestas (nada de buenos contra malos)en un coflicto inevitable, pero siempre tiene que aparecer algun adolescente mental que no puede dejar las cosas estar y tiene la insoportable necesidad de lanzar mas fuego ideologico al asunto.

    Ahora, los cambios de regimen siempre han sido "incostitucionales" y no por ello necesariamente injustos, justo y constitucional son cosas diferentes y la politica efectiva de un estado suele ser en general bastante incostitucional cosa que en los tiempos modernos es patente, ni que decir en 1936 cuando el estado era incapaz de garantizar la seguridad ciudadana. Ni el estado y la legalidad bien entendida son la misma cosa, ni es ilegal enfrentarse a un estado dadas las circustancias como sucedio en las postrimerias del franquismo, siempre y cuando los metodos sean adecuados como pueda ser la movilizacion pacifica o la guerra abierta, considerandose invalida la guerrilla o el terrorismo por involucrar a la poblacion civil.

    Es decir, criminalizar o distinguir buenos y malos por medio del argumento de la incostitucionalidad es perse falaz.

    ResponderEliminar
  9. Iñigo:

    Tienes razón en que estas digresiones sobre la guerra civil no hacen al caso, pero esto es lo que pasa en las discusiones en los blogs, como en las de taberna galáctica. Yo planté la semilla en la entrada.

    En mi defensa, yo no he hablado de buenos o malos, de justos o injustos. Tampoco he defendido el acatamiento de la ley en cualquier tipo de régimen. Aunque he dejado clara mi opinión tras sopesar los aspectos en el caso concreto de la rebelión que llevó a la guerra civil.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  10. José Luis: yo no tengo ningún empeño en nada, ni pretendo dar "argumentos" sobre nada. Simplemente contestaba a un dato erróneo de Jesús Zamora: los alzados no eran sólo "militares que pretendían tener al país atenazado...", ni mucho menos. Además, el 18 de julio iba a ser un golpe de Estado, un pronunciamiento como los del s. XIX, no una guerra, la cual se derivó del fracaso del mismo.

    La revuelta de Asturias fue "popular", claro que sí, aunque más bien fue "obrera" y más exactamente socialista, puesto que un altísimo % de los sublevados eran obreros, y el golpe fue apoyado principalmente por el PSOE. El intento de golpe controlado de Tejero no fue un golpe civil, aunque hubiese algunos civiles involucrados, puesto que mandos y ejecutores eran en su mayor parte militares y guardias civiles.

    Los etarras no son alzados, ni sublevados, sean civiles o militares, sino que son bandas clandestinas que no van a pecho descubierto, que es muy diferente.

    Item más, y ya que introduces la constitucionalidad como parámetro último de acuerdo con el cual valorar la conducta de los alzados, la cuestión es que en 1936 la constitución no era ya respetada por nadie, o mejor dicho, en realidad, nunca lo fue.
    Con lo cual la constitucionalidad o inconstitucionalidad del golpe en un período político de la Historia española en el que los pucherazos son moneda frecuente, los incendios de iglesias se miraban por las autoridades con la mayor indiferencia, se expulsa y destierra arbitrariamente a las más variadas personalidades, se prepara una sublevación nacional en 1934, se amenaza impunemente en el Parlamento y se asesina finalmente al Jefe de la oposición, como comprenderás es un dato que queda en un plano más bien secundario.

    ResponderEliminar
  11. No voy a negar la historia, pero de ninguna manera voy a justificar lo injustificable. El remedio fue mucho peor que la enfermedad. Mal de muchos es mal consuelo.

    ResponderEliminar
  12. Ah, ¿pero hemos pasado ya a hablar del remedio?

    ResponderEliminar
  13. Es una manera de hablar. No fue remedio, desde luego. El remedio deb'ia ser, en todo caso, ganar las elecciones y no querer ser salvapatrias.

    ResponderEliminar
  14. Yo no diría que Navarra fue conquistada en 1512, yo diría que en dicha fecha hubo una guerra civil en navarra y entre los dos pretendientes al trono (el rey aragonés y el rey francés) y al final el Norte se fue con Francia y el Sur con Aragón, que luego se integraría en Castilla por ciertas razones pragmáticas.

    Por supuesto que se puede considerar al rey francés como heredero legítimo y decir que Fernando conquista el Sur, pero se podría afirmar lo opuesto tranquilamente. Que Fernando hereda Navarra y que Francia conquista el Norte.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Podemos hacer historia ficción, pero eso arregla poco. Hubo una guerra civil en Navarra de la que sacó tajada el rey aragonés, que invadió el reino. Esto se puede decir así, haya habido más o menos apoyos en Navarra para esa invasión. En el norte no hubo invasión por parte de Francia. El reino de Navarra pervivió casi 100 años al otro lado del Pirineo hasta que los líos de herencias llevaron la historia por donde fue.

      Eliminar