sábado, 28 de abril de 2012

El tercer paso alemán


Parece que los acontecimientos están dando la razón a quienes pensaban que la postura alemana de insistir en que los países ajusten sus cuentas (la famosa austeridad) tenían más que ver con garantizar una disciplina fiscal previa a cualquier otra política monetaria o de impulso del crecimiento que con prejuicios ideológicos por parte de Merkel (o, tal vez, además de estos prejuicios), por cuanto que Alemania tendría que hacer de gran pagana. Véanse estos comentarios de Michele Boldrin en Nada es Gratis de hace ya un tiempo.

El primer paso se dio cuando el Banco Central Europeo dejó de temer a la inflación y cambió su política de subir (o no bajar los tipos de interés) a bajarlos aunque tímidamente. De esto hablé en su momento en esta entrada. No es un paso alemán, claro, que el BCE es independiente y tiene su mandato, pero no creo que nadie piense que se hubiera dado sin el visto bueno de la primera economía europea.

El segundo paso ocurrió cuando, tras mucho tira y afloja, justo cuando las primas de riesgo de España e Italia estaban empezando a descontrolarse y tras conseguir garantías de que estos países harían serios avances para reducir sus déficits (con reforma de la Constitución en España y sustitución de Berlusconi por Mario Monti en Italia), se dio luz verde al programa de compra de bonos de la deuda de estos países por parte del BCE.

Hoy está en portada el tercer paso. Merkel anuncia una "agenda del crecimiento" para la Unión Europea. Todavía está sin concretar y todavía sigue la canciller insistiendo en que todo pasa por vigilar los ajustes fiscales. Al final se trata de que si queremos convencer a Alemania de poner unos euros sobre la mesa para ayudar a los países en mayores dificultades no basta con decirle que si España e Italia caen arrastrarán a la propia Alemania, también habrá que convencerla de que esos dineros estarán bien gastados, y tener disciplina fiscal ayuda mucho a eso.

Esperemos que en este tira y afloja no hayamos cruzado ningún punto de no retorno.

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Hace tres años en el blog: La razón moral en bancarrota.
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miércoles, 25 de abril de 2012

¿Existe el problema de la inducción?


El argumento que presenta el problema de la inducción es, históricamente, el siguiente:

Observamos salir el sol cada día y presumimos que seguirá saliendo. Esto es un argumento inductivo y lo aceptamos porque ha funcionado bien en muchos otros ejemplos y aceptamos que seguirá funcionando. El argumento que justifica la inducción es, pues, circular.

En una entrada pasada me he referido a los argumentos circulares y he alertado contra meter en el mismo saco a los aparentemente circulares que a los circulares de verdad. ¿De qué tipo es la circularidad de la inducción? Sostendré que es solo aparente y para ello usaré un modelo formal en el que se justifica la inducción. Ya he hablado de él en más de una ocasión, pero creo que solo en comentarios o en las discusiones del Otto Neurath, se trata de la inferencia estadística.

Expliquemos un caso sencillo. Tenemos una urna con bolas. Sacamos una bola, que resulta ser blanca. Sacamos otra, que también es blanca. Seguimos así y a la enésima, que sigue siendo blanca decidimos que todas son blancas (es decir, que la siguiente que saquemos será también blanca). La inferencia estadística no dice que la siguiente será blanca con probabilidad 100%, sino que a medida que sacamos bolas y resultan ser blancas, la probabilidad de la hipótesis "todas las bolas son blancas" aumenta. Esto ocurre con los modelos de inferencia estadística clásico y bayesiano y ocurre con todo el rigor matemático. No hay circularidad.

Repasemos. El ejemplo es un modelo de aplicación de la inducción. La urna es la realidad (esa desconocida), la muestra de bolas son los datos (reales o aparentes) observados y la hipótesis "las bolas son blancas" son nuestra teoría acerca de esa realidad.

La inducción a que se refiere el problema que encabezaba la entrada es de la misma índole. No se afirma que la proposición "el sol saldrá mañana" esté establecida sólidamente por el argumento inductivo, sino que significa que la hipótesis "el sol saldrá mañana" cobra más valor (más probabilidad). Pero en realidad, en ciencia, tampoco es exactamente eso, sino que lo que dirá es que "el modelo o teoría científica que explica el movimiento de los astros del sistema solar" tiene más probabilidad de ser cierto gracias a los datos de que el sol ha salido cada día tal como el modelo predice y según ese modelo el sol saldrá también mañana.

Que el modelo de inferencia estadística sirva o no para entender la realidad es algo que no podemos deducir lógicamente y, como siempre, lo único que nos queda es mostrar su utilidad (inductivamente, claro). No hemos resuelto el problema del conocimiento, algo imposible lógicamente, pero sí hemos establecido que la inducción no tiene por qué ser un argumento circular e inválido.

Para una entrada posterior dejamos el problema de distinguir entre distintas teorías compatibles con los datos y que algunos llaman "el nuevo problema de la inducción".

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Hace tres años en el blog: La metamorfosis.
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domingo, 22 de abril de 2012

Argumentos circulares


Es relativamente fácil pretender que cualquier defensa de cualquier afirmación acerca del mundo es circular. Basta pedir que se definan todos los términos de la afirmación, para luego pedir que se definan los términos que aparecen en las definiciones y así sucesivamente. Como el lenguaje es finito, al final tendremos unos términos que se referirán entre sí de manera circular o que no se refieren a ningún otro.

Otra manera de hacerlo consiste en pedir justificación de todos los pasos realizados para hacer la afirmación y después pedir justificación de las justificaciones. Ocurrirá algo parecido. Por ejemplo, las afirmaciones que se consideran justificadas en una determinada ciencia lo son porque se sigue un método aceptado por quienes hacen esas afirmaciones. Así que parece que las justificaciones son circulares, que podían haberse hecho de otra manera y gozar del mismo tipo de apoyos.

Todo lo anterior es apariencia del discurso natural y descuidado. Tomemos el siguiente ejemplo:
= y
= x
En este sistema de ecuaciones, decir que x vale 7 porque y vale también 7 porque x vale 7 es un argumento circular.

Tomemos este otro ejemplo
= 3
= 1
Alguien puede argumentar que no es posible saber los valores de x y de y porque se basarían en un argumento circular como el anterior. Para conocer x hay que conocer y, y para conocer y hay que conocer x, de manera que postular cualquier valor caería en la falacia del argumento circular. Esto claramente no es así, este segundo ejemplo tiene solución no basada en argumentos circulares, = 2 e = 1. El argumento circular expresado verbalmente y sin rigor no es tal, pero hace falta un poco de cálculo riguroso para mostrar que no es así.

Cuando nos encontremos con un argumento que intenta mostrar la circularidad de otro habrá que preguntarse si estamos ante un caso de circularidad verdadero como en el primer ejemplo o falso como el segundo.

Ejemplo del primer caso: La adivinación del futuro puede existir porque sabemos que existen cosas inexplicables como la telepatía. Luego uno mira qué evidencias hay para mostrar que puede existir al telepatía y oye que por qué no, dado que la adivinación del futuro existe.

Ejemplo del segundo caso: Toda ciencia, tal como se explica aquí, aquí y aquí.

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Hace tres años en el blog: Un titular tendencioso.
Y también: La habitación china.
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miércoles, 18 de abril de 2012

Suicidio de parados en Italia


El Mundo publicaba ayer lo siguiente:
"Según ese organismo (Eures), que ha elaborado un informe titulado 'El suicidio en Italia en tiempos de crisis', sólo en el año 2010 se quitaron la vida en Italia 362 desempleados y ya el año anterior, 2009, fueron 357 los parados que recurrieron al suicidio. Se trata de un fortísimo incremento respecto a las cifras de los tres años precedentes, cuando de media los desocupados que optaban por suicidarse eran 270 al año. 
En total, entre 2008 y 2010 los suicidios entre los desempleados aumentaron en Italia un 39,2%."
Si miramos las cifras de desempleo en Italia observamos que era de una media del 6,5% en los tres años precedentes que se toman como base y que fue de un 8,4% en 2010, lo que implica un aumento de casi el 30% frente al incremento del 39,2% en el incremento de suicidios entre los parados. Es decir, que casi todo el aumento de los suicidios entre parados se debe al aumento de parados, no al aumento de la tasa de suicidios entre esa población. Queda un 9 y pico por ciento de aumento que explicar (en realidad, un 7%, que es lo que representa ese 9,2 sobre la nueva cantidad de parados), que bien puede ser por el incremento de la tasa debido tal vez a la desesperación o simplemente puede ser parte de la desviación sobre la tendencia que hay cada año. De hecho las variaciones en las tasas de suicidio de año a año tienen variaciones de esa magnitud, así que no hay razón para pensar en ningún incremento especial.

No es bueno jugar con los números de esta maneara. Tenemos bastante con lo mal que anda la economía como para añadir catastrofismo y sensacionalismo.

¿Cómo de alta es la tasa de suicidios entre los parados? La tasa de suicidios por 100.000 habitantes en Italia es del 7,1. Considerando que ese 8,4% de desempleo corresponde a unos 2.150.000 parados tenemos que entre esta población la tasa de suicidios es de 16,8 por 100.000 parados, justo el doble de la media. Pero esto es engañoso. Habría que compararlo con un colectivo de similar edad, educación y otras características. Si solo quitamos las edades en que uno no puede estar en paro por no pertenecer a la población activa, la tasa de suicidios es más o menos la media (la mayor tasa en edades superiores a 65 años se compensan por las menores tasas de los menores de edad).

A falta de controlar por otras circunstancias, parece que, efectivamente, entre los parados la tasa de suicidios es el doble que la media, pero también parece que esta tasa no ha variado con el aumento del desempleo. Como hay más parados, esto implica que la media de suicidios aumenta. Si hay más efectos, es pronto para decirlo y, desde luego, estos datos que se apuntan no lo dicen.

Hace un tiempo hacíamos consideraciones parecidas con la tasa de suicidios en France Télécom.

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Hace tres años en el blog: Los libros y los cánones.
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lunes, 16 de abril de 2012

La legalización de las drogas


Poco se ha hablado de la cumbre americana de Cartagena de Indias y de un punto novedoso en el orden del día: la legalización de las drogas. Ya se ha dicho que nada iba a salir de esa discusión, que lo importante era que por primera vez se hablara de ello. Con un poco de suerte, la próxima vez será menos tabú y quién sabe si un día no se analizará el problema con menos distorsiones ideológicas.

En Economía suele ponerse el caso de las drogas como el ejemplo de lo que pasa cuando se quiere impedir el funcionamiento de un mercado. En lugar de ocurrir lo que quiere ingenuamente el legislador, sucede que el mercado pasa a ser un mercado negro, con consecuencias siempre negativas. El precio aumenta y también el nivel de delincuencia y criminalidad alrededor de ese mercado que, más fácilmente que en el mercado libre, pasará a estar en manos de las mafias.

Es claro que esa no tiene que ser toda la justificación para legalizar una actividad. A nadie se le ocurre legalizar el mercado de contratación de sicarios para ajustar cuentas privadas, por ejemplo. La cuestión es, entonces, si la actividad de consumir drogas presenta una inmoralidad como lo es ordenar un asesinato (aunque, de serlo, lo sea en menor grado).

La única razón por la que el Estado puede inmiscuirse en el consumo de drogas libremente decidido por un ciudadano adulto es, por una parte, la posible falta de información respecto a las consecuencias en la salud del consumo y, por otra, la adicción del producto. Y estas razones deben ir acompañadas de un razonamiento más, que los ciudadanos quieran delegar en el Estado la decisión sobre el consumo de sustancias de las que no tienen información y que acepten que, efectivamente, no tienen tal información en ese caso. En cuanto a la adicción, debe aceptarse que la decisión de hacerse adicto no es la que se toma cuando se consume la droga y que el Estado no puede comprometerse a no hacer nada por la salud del adicto.

Frente esas posibles implicaciones morales están las implicaciones morales de dejar el mercado de las drogas en manos de mafias con el resultado ya conocido en términos de criminalidad, corrupción y adulteración, más aún cuando es posible resolver los otros problemas morales de su consumo difundiendo información adecuada, cobrando un impuesto a la droga en un mercado legal para hacer frente a los problemas de salud y con algún otro tipo de regulación. La experiencia de la ley seca debería haber servido para entender todo esto.

Y justamente la experiencia de la ley seca nos puede hacer entender algo más. El alcohol era legal en los países vecinos, así que la violencia asociada a las mafias se producía dentro de los EEUU. No hace falta legalizar las drogas en todo el mundo. Con que lo sean en América Latina será suficiente para que la violencia se traslade a territorio usamericano. Será la manera en que los EEUU entiendan el problema en cabeza propia si es que no lo quieren entender en cabeza ajena.

viernes, 13 de abril de 2012

Cosas de Savater


Ayer, Fernando Savater nos escribía un interesante artículo con sus reflexiones sobre la música de Bach, concretamente, su Pasión Según San Juan. A mitad del artículo nos suelta esta prenda:
"Gracias a la industria discográfica, que por el momento en el terreno de la música clásica todavía perdura pese al acoso de la piratería canallesca, contamos con muchas grabaciones excelentes."
Por el mismo precio podía haber dicho:
"Gracias a la industria discográfica, que no desaparece como pretendían los agoreros contrarios a la libertad de la copia privada, contamos con muchas grabaciones excelentes."
Es tan coherente con el dato que nos muestra y más ajustado a toda la realidad que nos dice que en estos tiempos de copia privada el número de grabaciones no ha descendido.

martes, 10 de abril de 2012

El deber es lo primero


La palabra alemana "Schuld" significa tanto "deudor" como "culpable". La española "deber" como sustantivo (el deber, lo que se debe) significa tanto "deuda" como "lo que hay que hacer". Así que no debe extrañar que lo que los alemanes ven como un mal aquí lo tengamos como un imperativo categórico.

domingo, 8 de abril de 2012

El don del Nilo


El Nilo es el segundo río más largo del mundo, sólo un poco más corto que el Amazonas según las últimas mediciones. Es uno de esos ríos caprichosos, como el Colorado o el Congo, que parecen desafiar a la propia naturaleza de la que surgen. Nace en la zona de los grandes lagos africanos, desde donde se define su trazado más largo con el Nilo Blanco; pero su caudal se debe, sobre todo, a la rama más corta, el Nilo Azul.

Podía haberse ido a desembocar al océano Índico o al mar Rojo, mucho más cerca, pero se decidió por el Mediterráneo porque las montañas que flanquean el valle del Rift por el este le cierran el paso. En su camino más de dos mil kilómetros atravesará el desierto del Sáhara sin recibir una sola gota de agua de ningún afluente y recogiendo apenas unas precipitaciones testimoniales. Hasta el delta de su desembocadura, son apenas unos pocos kilómetros los que desde sus márgenes se benefician del agua. En muchos lugares la inmensidad de arena y tierra yerma empieza a solo unos metros de sus orillas. La imagen del desierto atravesado por el río es una de las visiones más irreales que se pueden ver en este planeta.

Es ahí, en el desierto, lejos de la frondosidad de sus verdes orígenes, donde el Nilo ve recompensada su proeza. Nada menos que una de las primeras civilizaciones del mundo se desarrolló a su paso. El antiguo Egipto de los faraones, rebosante de esplendor y grandeza, asombro de sus coetáneos y de las generaciones actuales. Una de las civilizaciones más poderosas e inmovilistas que ha existido. Hay quien achaca a ese inmovilismo su desaparición final. Dudosa causa que tardó tres mil años en hacer efecto.

¿Dónde habrá estado de vacaciones este bloguero?