sábado, 3 de marzo de 2012

Por culpa de dios

En la lengua castellana tenemos unas cuantas expresiones cuyo significado original ha quedado totalmente desplazado, mientras que otras son simples muletillas a las que ni siquiera prestamos atención. A mí me gusta, de vez en cuando, fastidiar un poco con algunas de ellas, sobre todo las religiosas. Tenemos a dios en el "adiós", en "pordiosero" y seguramente en unas cuantas más.

Yo mismo digo "gracias a dios" o "si dios quiere" como una manera de hablar, pero a veces me entretengo en tomar al pie de la letra esta expresión si la usa la persona con la que hablo. Me dice alguien que en su casa él y su mujer han cogido la gripe, pero que gracias a dios, el niño está bien y enseguida me sale decir "pues en la mía, por culpa de dios, también la hemos cogido", o algo así.

Y es lo que planteo en la entrada de hoy. Ya que está difícil eliminar la expresión "gracias a dios", propongo contrarrestarla un poco añadiendo esta otra al vocabulario: "por culpa de dios". Cuidado cómo se dice, porque si tu interlocutor dice "gracias a dios" para referirse a lo bueno que le pasa a él y tú respondes con "por culpa de dios" para lo malo que te pasa a ti, uno podría ver algo de justicia divina en el diálogo. Mejor usar el "por culpa de dios" para hablar en segunda o tercera persona. Recuerdo que lo mío era por fastidiar un poco.

13 comentarios:

  1. Mejor limitarse a decir "gracias a dios, mi hija está enferma". Queda aún más chocante.

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  2. Otra vez la (mala)educación católica y la sumisión de los educados en el catolicismo, dicho sea con cariño. Algunos, bastantes más de los que creeríais, jamás hemos dicho cosas como "gracias a dios". No está en el imginario de todos los españoles sino sólo en el de una parte (grande, pero parte) de los españoles, por eso no tenemos que eliminarlas. Adiós o pordiosero tienen, a estas alturas, tanto trasfondo religioso como "ojalá", o sea ninguno aparte de la etimología. Lo de "gracias a dios mi hija está enferma" es graciosillo, pero sigue siendo profundamente católico. Me recuerda a mi padre respondiendo a su primo Alfonso, que se despide siempre con un extraño "que dios te bendiga", su sempiterno e incomprendido "y a ti que la inteligencia te ilumine, algún día".

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    1. Bienvenida al blog, Nuria.

      Yo intento no decir esas expresiones, pero alguna me sale. De todas maneras, esta entrada iba un poco de coña, como puedes ver por estar etiquetada como de humor. (Si bueno o malo es otra cosa.)

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  3. Como decía Luis Buñuel: "Soy ateo gracias a Dios". Por cierto, hay un cabo (geográfico) en América Central que se llama "Gracias a Dios". Parece que el nombre proviene de la protección que otorgó a las naves de Colón en una tormenta y a Don Cristóbal no se le ocurrió otra cosa que ponerle ese nombre.

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    1. «Gracias a Dios que al fin salimos de esas honduras», comentó Colón. Y así se llama el pais caribeño: Honduras. Más o menos, que aún hay controversia de quién fue el primero en llamar a aquellas tierras cerca de la costa, Honduras, por la hondura de sus playas.

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    2. Bernardo:

      No quedaría mal y darle la vuelta para ser ateo por culpa de dios.

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  4. ¿Y qué me decís de la expresión "a la buena de dios", que parece dar a entender una cosa hecha sin cuidado, dejando que salga lo que salga, casi al azar, sin ninguna seguridad en una buena ejecución del tema en cuestión?

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    1. Esa expresión siempre me ha chocado. Parece un reconocimiento del refranero a la indiferencia de la naturaleza por los avatares humanos.

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  5. La frase "culpa de Dios" se lo aprendí a Schopenhauer, y más o menos decía así: "Dios ya sabía todo lo que iba a ocurrir, y por lo tanto, el mal que ha sucedido es culpa suya". Nunca la uso, y en su lugar, a prácticamente cualquier discusión introduzco una frase más peligrosa: simplemente es: "Dios no existe", que ya fastidia por su reiteración a mi familia y amigos.

    ¡Salud e inquieta alegría!

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  6. Salud, Enrique. Tomo nota de tu frase peligrosa y de las reacciones familiares.

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  7. Lo delicado de ese bromear fastidiando que comentas, es que hiere muy hondo. Y como sabes, dios está en mi boca todo el tiempo, porque aquí es difícil tener una conversación, por breve que sea, y no mencionar sus bondades. Eso de despedirse y no decir SI DIOS QUIERE,o desear buena salud y no decir PON A DIOS POR DELANTE puede ser visto desagradable en mi medio. O decir que vas de viaje y que te digan DIOS TE CUIDE Y TE GUÍE y que uno responda ME CUIDO YO Y CONDUZCO YO genera sensaciones fuertes en quienes lo reciben.

    Lo hacía mucho en la plenitud de mi adolescencia y luego en mis veinte... Pero opté por comprender. Nosotros no tenemos fanatismo, podemos mencionar a dios indistintamente, pero los creyentes sienten una sensación amarga cuando uno niega, aun sea en broma, sus creencias. No es necesario llevarle ese "sabor a cobre" a su paladar.

    Claro, mi medio es más atrasado en esas cosas.

    Ya imaginas.

    Un saludo.

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  8. Pues justamente es en tu tierra donde más me tienta usar el por culpa de dios o algo parecido. Confieso que resisto demasiadas veces esa tentación. No debería.

    Un saludo,

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