sábado, 11 de junio de 2011

Un ciego guía a otro ciego



Hace unas semanas se publicó en enchufados la entrada que reproducimos aquí por la relevancia que tiene el tema y por solidaridad, ya que hace dos días, tenemos noticias de algunas amenazas de denuncia.


Esta es la trans­crip­ción de un frag­men­to de vídeo visto este miér­co­les en el In­ter­me­dio (vídeo 2, mi­nu­to 20’30 mi­nu­to 2’05”). En ella, una mujer (pre­su­mi­ble­men­te an­cia­na) llama al pro­gra­ma noc­turno del vi­den­te San­dro Rey de La Sexta, para pre­gun­tar por la salud de su nieta. Se pro­du­ce en­ton­ces la si­guien­te con­ver­sa­ción:
—Hola, bue­nas no­ches.
—Hola bue­nas no­ches.
—¿En qué le puedo ayu­dar se­ño­ra?
—Pues que­ría saber por la salud de una nieta.
—La salud de su nieta… hom­bre, aquí lo que más salen son aler­gias e in­su­fi­cien­cias res­pi­ra­to­rias. ¿Cómo se llama usted?
—Yo soy Leo.
—Pues lo que veo más es can­san­cio fí­si­co o psí­qui­co, o sea, “farta” de oxí­geno, al­gu­na aler­gia, algún pro­ble­ma en las vías res­pi­ra­to­rias, las fosas na­sa­les, fa­rin­ge, bron­qui­tis… eso es lo que yo le veo a esta nena. Pero no le veo nada malo, es pa­sa­je­ro, o sea…
—No, no, no… la niña no tiene eso eh, nada de eso.
—Bueno, eso es lo que yo estoy vien­do.
—No, no, no, no.
—¿Qué tiene la niña?
—La niña tiene una en­fer­me­dad que le lla­man Crohn, el Crohn. Y aler­gia no tiene nin­gu­na.
—Sí… bueno, pien­se que… pero pien­se que esa en­fer­me­dad le crea una in­su­fi­cien­cia res­pi­ra­to­ria. Eso no lo digo yo, lo dicen los doc­to­res de…
—De mo­men­to no la tiene.
—Bueno, esa en­fer­me­dad, nor­mal­men­te, los doc­to­res de este país lo saben, crea a me­di­da que va pa­san­do el tiem­po una in­su­fi­cien­cia res­pi­ra­to­ria y las de­fen­sas al estar muy dé­bi­les tam­bién crean aler­gias, aler­gias in­ter­nas-ex­ter­nas, o sea… Esa es la en­fer­me­dad que usted dice que tiene esa nena. Pues muy bien, pero de­ri­va, de­ri­va… o sea, lo que yo digo estoy di­cien­do es de­ri­va. Y ella, aun­que ahora no lo tenga no quie­re decir que no lo vaya a tener pero yo, a la nena, lo que sí le re­co­mien­do es que la pon­gáis en manos de un buen ho­meó­pa­ta.

Es decir, que el tipo le diag­nos­ti­ca a la nena aler­gia, in­su­fi­cien­cias res­pi­ra­to­rias, can­san­cio fí­si­co, can­san­cio psí­qui­co, falta de oxí­geno, pro­ble­mas en las fosas na­sa­les, la fa­rin­ge, bron­qui­tis… todo ello pa­sa­je­ro. Y cuan­do la nena re­sul­ta tener una en­fer­me­dad cró­ni­ca in­tes­ti­nal este señor in­sis­te en que ha acer­ta­do ¡y le re­co­mien­da acu­dir al ho­meó­pa­ta! Desde luego, el que no se con­sue­la es por­que no quie­re. Por no ha­blar de su total des­co­no­ci­mien­to de la en­fer­me­dad de Crohn o las aler­gias (más le va­dría tener un buen ac­ce­so a Goo­gle y dejar de darle vuel­tas a la di­cho­sa bo­li­ta). Qui­zás su único acier­to (pura poe­sía) haya sido afi­liar­se tan opor­tu­na­men­te con esos ti­ma­do­res re­co­no­ci­dos. Ha­bría que in­cluir una ad­ver­ten­cia de este tipo en los me­di­ca­men­tos ho­meo­pá­ti­cos:



Es de chis­te y ten­dría mu­chí­si­ma gra­cia si no fuese tan real. Hay gente, es­pe­cial­men­te la más vul­ne­ra­ble, que con­fía ver­da­de­ra­men­te en estos es­ta­fa­do­res. Y lo malo no es que ne­ce­si­ten una pa­la­bra de con­sue­lo y al­guien se la pro­por­cio­ne. Su­pon­go que al­guien que llama a un pro­gra­ma así tiene una pre­gun­ta que no sale de su ca­be­za y sólo desea darle so­lu­ción de forma po­si­ti­va (si re­ci­bie­se una mala no­ti­cia, la preo­cu­pa­ción no se di­si­pa­ría y eso lo saben bien los vi­den­tes ti­ma­do­res). Lo malo es cuan­do este con­sue­lo pre­ten­de sus­ti­tuir al con­se­jo opor­tuno de un ex­per­to, su­plan­tar al mé­di­co, cuan­do se atre­ve a dar diag­nós­ti­cos y a su­ge­rir tra­ta­mien­tos. En­ton­ces pone en ver­da­de­ro ries­go la salud de quien con­fía en él, a veces más que en su pro­pio mé­di­co.
¿No se po­drían prohi­bir este tipo de con­duc­tas? ¿de­nun­ciar al es­ta­fa­dor por ne­gli­gen­te en casos pa­re­ci­dos? Sería tan sen­ci­llo como obli­gar­les a dar una res­pues­ta es­tán­dar cuan­do se trate de temas mé­di­cos. Po­dría in­clu­so estar gra­ba­da, una voz en off que re­so­na­ría en el plató au­to­má­ti­ca­men­te ante la lla­ma­da opor­tu­na: “Las au­to­ri­da­des sa­ni­ta­rias ad­vier­ten que este in­tri­gan­te no está au­to­ri­za­do a es­ta­far­le en temas re­la­cio­na­dos con su salud. Si busca con­se­jo, hable con su mé­di­co”. A fin de cuen­tas, no creo que las ca­je­ti­llas de ta­ba­co sean mucho más per­ju­di­cia­les que estos se­ño­res.

8 comentarios:

  1. El modelo de negocio es el siguiente: yo, simple estafador, me hago pasar por conocedor de un "arte" ancestral que tiene su origen en ritos milenarios (lo cual le da cierta solemnidad), aún cuando sé que en lo único que me baso es en contestar algo dependiendo de la información que me va dando el sujeto que llama. Entonces comienzo a decirle generalizaciones para que haya más probabilidad de acierto en mis "adivinaciones". A eso he de añadirle que sé que la mayoría de estas personas que llaman lo hacen en un estado de sugestión bastante importante, por el cual además me va a ir dando la razón. Y en el último caso de que mi fallo de precisión sea muy gordo, siempre intentaré darle la vuelta a la tortilla de alguna forma.

    El 80% de las personas que podrían encargarse de estas estafas tan interesantes para ciertos medios de comunicación e incluso proveedores telefónicos no tienen LA MENOR IDEA de que existen porque viven en otro mundo y al otro 20% les da exactamente igual, porque no entraron en sus cargos públicos para estos temas.

    Pero no te equivoques, Ferreira, el perfil de estos personajes es mucho más peligroso cuando se trata de políticos, constructores, puestos de dirección funcionariales, etc. Vendehumos hay en todos lados gracias al neoliberalismo, ese que le gusta tanto a los conservadores, que son conservadores para todo menos para temas de dinero, claro. Para eso son los más liberales. Y curiosamente son los que suelen criticar la Evolución, pero los que mejor se adaptan a los cambios del ambiente... Este tipo de cosas no están reguladas porque algún gilipollas las debió considerar como un "negocio" más.

    Este es un único tema. Si quieres alucinar puedes estudiar más sobre la relación TV, sms, proveedores de telefonía y concursos telefónicos, o el de los diferentes casinos y casas de apuestas online, que es una auténtica orgía. Es gracioso que ahora empiecen a publicarse el tema de partidos amañados por la Camorra, cuando hace 10 años que los hay en diferentes países y nadie dice nada.

    En fin, lo que aquí escribes es la pequeña punta del iceberg... pero por algo se empieza.

    Saludos.

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  2. Se me olvidó entrecomillar negocio en la primera línea... Porque es evidente que sólo a un gilipollas le pueden colar que esto sea un negocio en vez de una estafa.

    Saludos.

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  3. Uf (exclamación positiva), la verdad es la verdad, dígala KC o el porquero del Universo.

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  4. Hace unos años la tía de un compañero de clases mio fue al ho­meó­pa­ta por un problema estomacal. Ella decía sentirse mejor y mi compañero nos recomendó al homeópata a todos. Finalmente, esta señora falleció de cancer: como nunca fue al médico, salvo a lo último, no se lo pudieron diagnosticar a tiempo.

    Después de eso mi compañero se quejó de lo malo que había sido el trato en el hospital. Él sigue recomendando al homeópata.

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  5. KC:

    No te preocupes, no me equivoco o, por lo menos, lo intento y estoy al tanto. Gracias por tu aportación.

    José Manuel:

    Lo mismo digo.

    Polarizador:

    Total, mal no te va a hacer, dicen siempre.

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  6. José Manuel,

    No me convence... Si acaso sustituye mi alias por el del porquero, no por Agamenón. En cuanto a la verdad, lo más sencillo para encontrarla es sentarse, absorber información de alguna fuente, procesarla y tejer como hacía Penélope. Eso es sencillo. Lo realmente complicado es querer aceptar lo que uno no está dispuesto, por diferentes motivos. Aparte de no quedarse a mitad de película y querer contarla toda.

    Saludos.

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