lunes, 21 de agosto de 2017

El dilema del tranvía



Hace unas semanas hablamos de los problemas de tranvías en el Otto Neurath y poco después acudí a un seminario del psicólogo Robert Kurzban, que los utiliza como ejemplo de su tesis sobre la mente modular. Me persiguen desde que me dedico a la teoría de los juegos, así que aquí va una entrada para ellos.

Un tranvía está en loca carrera sin frenos a punto de arrollar y matar con toda seguridad a un grupo de 10 personas. La única posibilidad de salvarlos es desviar el tranvía a otra vía en la que solo hay una persona, que también morirá irremediablemente si se hace ese desvío. ¿Qué harías si tuvieras la posibilidad de apretar el botón que active el desvío?

Este tipo de problemas nos muestran que nuestras posiciones morales pudieran no tener una buena justificación.

Esto último es así porque está documentado en experimento tras experimento (mentales, claro, nunca se mata a nadie) que las respuestas a la pregunta crucial depende de variables aparentemente irrelevantes.

Por ejemplo, la respuesta varía si la persona a la que sacrificar es un trabajador de la compañía que hace su trabajo reparando la vía o es una persona que camina irresponsablemente por ella, o si en lugar de desviar el tranvía lo que se puede hacer es arrojar a una persona desde un puente para que caiga delante del tranvía y lo haga descarrilar, o si no se sabe en qué posición está el interruptor que hace desviarse al tranvía, pero se puede dar la orden de que se quede en la que queremos, y así infinitas variaciones del tema.

¿Por qué habría de cambiar la respuesta? ¿Qué tal si esas 10 personas son ciudadanos en un hospital que morirán si no reciben un transplante y la persona que puede salvarlos y morir al donar sus órganos es un ciudadano cualquiera? En todos los casos se trata de 10 vidas frente a una.

Esta es mi postura ante el problema del tranvía. Por una parte debo decir que si el dilema es exactamente como se describe en cada problema, entonces la decisión debe ser la misma en todos ellos. El problema, a mi entender, radica en que no hay manera de pensar ninguno de los problemas en su descripción exacta. Me pasa lo mismo que cuando intento explicar el equilibrio en un juego. Logro ser más convincente cuando exagero hasta el ridículo el contexto del juego: dos personas nacen, juegan el juego, son lo felices que les toque ser según el resultado y se mueren. Ese es todo su universo. En esas circunstancias es más aceptable el equilibrio. Claro que esas son exactamente las circunstancias del modelo, pero es claro también que no existen de esa manera en el mundo real.

Pienso que nos ocurre los mismo con los problemas de tranvías. Tomados al pie de la letra requieren una solución única, tomados en contexto –y cada uno es libre o esclavo de sus instintos de montarse un contexto- pueden estar pidiendo a gritos soluciones distintas.

Una sociedad que sacrifique al azar un ciudadano para donar sus órganos es poco apetecible y poco viable. Sospechosamente, los órganos de los familiares de los ministros o de los médicos se verán poco en el quirófano, los ciudadanos dedicarán grandes recursos a esconderse de las patrullas que buscan donante, .... Este tipo de arbitrariedades, con sus costes añadidos puede estar detrás de una regla impresa en nuestro cerebro que diga que es una mala manera de decidir. Otras reglas, tal vez justificadas, tal vez confundidas, pueden estar detrás de reacciones distintas en las otras versiones del problema.

67 comentarios:

  1. Difícil dilema, poco tiempo para decidir (por la alocada velocidad del tranvía), poca información y malas consecuencias en ambos casos. Como suele suceder en estos casos no me gustaría nada encontrarme con una situación así en mi realidad cotidiana.
    Abusando de tu tolerancia a la cobardía moral y a tu tolerancia al humor barato y facilón para evitar dar una respuesta a este dilema diré irónicamente: "Es que yo siempre he sido mas de autobús que de tranvía" :D :D
    Soy un cobarde moral y un graciosillo del tres al cuarto, lo sé, tocayo, lo sé ;)

    ResponderEliminar
  2. "Es que yo siempre he sido mas de autobús que de tranvía"

    Entonces, imagina que viene un autobús a gran velocidad y sin frenos...

    ResponderEliminar
  3. Creo que la posibilidad de apretar el botón de cambio de via, no sería una de las que se me pasaran por la cabeza, como no se me ocurriría tampoco coger una persona quitarle la vida y utilizar todos sus organos para traspalantarlos a otras diez que los necesitan aunque dependiera su vida de ellos.
    Son posibilidades que a pesar de existir para mí no son posibilidad, porque la vida humana no es(o no tendría que ser) una mercancía utilizable para un fin.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. yo creo que todo depende de variables piensa esto y si salvar a 10 personas para desviar el trenvía fuerá la fin de Albert Einsten o Gaudí o alguien así, estarías pribando al mundo de sus obras la cuestión herradica en que la inacción es una acción en sí misma ya que en estos casos el hacer o no hacer algo tendran una consecuencia real.

      Eliminar
  4. "Entonces, imagina que viene un autobús a gran velocidad y sin frenos..."

    Ja, ja, ja, :D :D Esto me está bien merecido por intentar pasarme de listo.

    José Luis, si estamos hablando de un autobús por muy rápido que vaya y teniendo en cuenta que no tiene frenos ante el anterior dilema expuesto tengo la posibilidad de meter (si es necesario a las bravas) una velocidad mas corta y aunque reviente la caja de cambios (cosa sin importancia si se trata de evitar una/s muerte/s), aminoraré la velocidad sustancialmente.
    Bajo las condiciones anteriormente expuestas es posible un dilema del tranvía pero no un dilema del autobús.

    Ahora mas en serio, de este dilema yo no sé salir, mi posible reacción la desconozco por completo, quizás me quedaría paralizado por completo sin saber que hacer, quizás actuaría de manera impulsiva y elegiría cualquiera de las opciones de manera aleatoria, pero estoy seguro de que mi raciocinio en cualquier caso no controlaría la situación.

    ResponderEliminar
  5. Hay una falacia en el dilema. En una situación como esa no tenemos disponible información sobre las víctimas, por lo que ante ella, todos haríamos lo mismo, tratar de causar lo que consideramos en ese momento, y es probable que el razonamiento sea correcto, el menor daño posible, es decir, conducir el tranvia hacia donde menos personas estén. Este tipo de decisión, no entra en consideraciones eticas y morales, simplemente estamos hablando de segundos para decidir con la información disponible en ese momento. Si le añadimos toda esa información que sería disponible solo a posteriori, ya sería convertir la situación en otra cosa que nada tiene que ver con la naturaleza de la misma.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  6. No acabo de ver el problema. Moral cada cual tenemos la nuestra, así que la decisión que tomemos dependerá de nuestro sistema de valores y no del contexto. Si estimo que es preferible salvar 5 vidas o una sola, entonces le daré al botón. Pero también puedo estimar que 5 vidas son pocas y que como la ocasión la pintan sola, añadir unas cuantas víctimas más. Y ninguno de los dos se lo reprochará, porque habrá actuado consecuentemente a sus creencias y normas morales.

    También puedo creer que la vida de un trabajador o un niño son más valiosas que las de un enfermo o un anciano. Entonces desviaré el tranvía intentando salvar las vidas que para mí son más valiosas.

    Otra cosa es la consideración ética que se saque. ¿Es más importante una vida o varias?
    ¿todas las vidas son de igual importancia? La declaración universal de los derechos humanos nos dice que todas las personas son iguales y de igual valor. Así que según la ética actual no debería cambiarse el rumbo del tranvía porque cada una de las seis personas son iguales y de igual valor, lo que no quiere decir que moralmente, uno pueda hacerlo y no obstante obrar en conciencia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si quieres decir que la decisión es sujetiva es cierto cuando ponemos muchas variables como... imagina que el tren va dirección hacia tú hijo y desviarlo supone la muerte de 33000 personas porque resulta que hay un estadio de fútbol en sú trajectoria para tí esas 33000 personas no importaran (en ese preciso momento), pero si miramos el hecho subjetivo sin ponerles caras la opción de la mayoría de seres humanos es minimizar riesgos, la opción del 99,9% sera la de mantener la trajectoria inicial, en pro de las 33000 personas, y aquí no hay mucha relación subjetiva quiero decir... pongamos un ejemplo real sabes que los aviones tienen que mantener una cierta altitud, cuando sobre vuela determinadas ciudadas y no pueden sobrevolarlas en algunos casos, la cuestión es que si un avión con fines mal intencionado variara su altitud y fuera directo a un nucelo urbano y aún teniendo en cuenta que fuera un problema mecánico un caza iría en su intercepción a derrivarlo afavor de los ciudadanos de ese nucleo urbano ya que siempre se elije la opción menos mala.

      Eliminar
  7. lolita, José Luis:

    Lo que pasa es que la decisión de no hacer nada tiene implicaciones. Si el tranvía va hacia el grupo de 10 y no haces nada, mueren 10. Si va hacia la persona sola, muere uno. La vida humana no será mercancía, pero con una se salvan o no más

    La idea de no hacer nada puede tener su razón, en general, pero eso no la hace moralmente superior intrínsecamente. Tal vez la regla "en estos casos, mejor no hacer nada" implica que las muertes no sean más que causa de accidentes y, por tanto, se elimine del grupo social todo recelo por la posibilidad de que alguien decida en estos temas y lo haga de manera interesada o corrupta.

    Jesús Castro ... :

    El que uno quisiera más datos no hace el dilema falaz. En ausencia de información puedes pensar que las 10 personas son exactamente iguales entre sí y exactamente igual de ajenas o cercanas a ti.

    Si hay que tomar la decisión en milésimas de segundo, no entran consideraciones morales reflexionadas, pero sí consideraciones morales imbuidas en nuestras preferencias.

    ... y elena:

    El problema es que no todo el mundo reacciona como tú, que asigna sin problemas la misma solución a todas las versiones del dilema que impliquen el mismo número de vidas.

    El problema está en que la mayoría de la gente reacciona de manera distinta. Por ejemplo, la regla de no hacer nada salvará a los 10 o al 1 según donde esté el interruptor.

    Hay muchas más complicaciones. Por ejemplo, hay gente que no haría nada si las vidas son ajenas, pero que sacrificaría una por las otras 10 si todas son hijos, por ejemplo. O si uno es un general y las vidas son soldados. Es decir, en situaciones en las que se salva algo más que vidas (los genes, los peones de la guerra,...) cuando ese algo es de importancia para uno. No se hace nada cuando a uno ni le va ni le viene.

    A todos:

    En resumen. Yo vengo a decir que las reglas del tipo "no hacer nada", "maximizar el número de vidas" o "no usar unas vidas como instrumentos para salvar otras" son superiores moralmente no nos dicen demasiado sobre por qué reaccionamos o no de tal manera ante estas situaciones.

    El buscar las posibles razones de por qué aplicamos unas y no otras en función de qué contexto y como fruto de unas preferencias morales seguramente moldeadas evolutivamente para funcionar más o menos bien en el entorno en el que hemos evolucionado, me parece una línea de investigación más fructífera.

    Explicar eso, si es posible, no implica aceptar que tengamos que seguir esas reglas, claro.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Suele decirse "del dicho al hecho existe gran diferencia", entonces muy distinto es teorizar el dilema del tranvía, del naufrago, etc.. que no trasciende lo meramente subjetivo y donde la ética o moral puede ser analizada y otra es ser parte del hecho, donde el instinto de preservación natural no permite ningún análisis, sino el deseo de subsistir o vivir, sin importar a que costo, por ello el Derecho Penal incorporan normas relacionadas con "el mal menor" y viene entonces a mi memoria un naufragio en el Pacifico, donde hay un bote salvavidas para 6 personas y los náufragos eran 8 personas, difícil expresar en palabras la lucha para acceder a bordo, por suerte la autoridad del momento tomo rápido control de la situación y embarcaron las 6 personas más afectadas física y moralmente y las otras dos mas saludables fueron provistos de trajes de neoprene y permanecieron en el agua sujetos al bote, pasado unas 10 horas el rescate se realizo sin inconvenientes y hoy es solo un recuerdo de vivencia....

      Eliminar
    2. Y como lo resolvieron en el titanic,para mi la supervivencia no tiene etica ni moral, solo se rige por el caos

      Eliminar
  8. Me parece que el dilema presenta dos opciones:

    1)Accionar el interruptor
    2)No accionar el interruptor

    A pesar de lo extraño que parezca, yo considero que la opcion 2) difiere de una posible option 3) equivalente a "no tomar accion".

    Me refiero a no tomar una decision alguna y dejar el asunto a la causalidad (un cumulo inevitable de sucesos llevaron a esas personas a estar sobre las vias del tren).

    Dadas las apremiantes circunstancias, seria valido abstenerse de tomar una decision basada en preconceptos morales o en informacion parcial y sencillamente dejar ocurrir lo que tenga que ocurrir?

    No hablo de un Darwinismo al extremo, sino de la posibilidad (de la apologia) de no involucrarse moralmente en la muerte de 1 o 10 individuos sobre la premisa de que uno no conoce las causas del suceso inminente.

    que piensan?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. 3 opción es= 2 opción te has dado cuenta y el experimento va más hacia la premisa que estabas diciendo quiero decir la acción o la inacción son 2 acciones el hecho de no hacer nada es una acción ya que estas dejando que pase lo inevitable (es decir que dejar que pase un acontecimiento pudiendo evitarlo es una acción en sí misma) si no miralo de esta manera eres un bateador y te lanzan una bola que puedes batear la accion de batearla o la possibilidad de no golpear la bola y dejar que el receptor la coja es otra acción aunque no hagas nada, la utima acción se denomina bola en el argot del beisbol, la moral es cierto que influye pero creo que el experimento va más hacia las acciones y la de minimizar daños.

      Eliminar
  9. Para estar amarrados a las vias, algo debieron haber hecho. Ahora que si fue un asesino, desvio el tren a que mate a uno, e intento liberarlo antes de que lo aplaste.

    ResponderEliminar
  10. Respuestas
    1. es un 50% de posibilidades a no ser que sea una moneda con 2 caras entoces es inutil si juegas contigo mismo solo sería viable en el aso que otra persona estubiéra contigo y no supiese lo de la moneda y le dieras a elejir entre cara o cruz y ella dijiera que cruz es la opción de las 10 personas y irremediablemente la que saldría sería la otra opción así que estarías dejando las cosas otro 50%

      Eliminar
  11. "El buscar las posibles razones de por qué aplicamos unas y no otras en función de qué contexto y como fruto de unas preferencias morales seguramente moldeadas evolutivamente para funcionar más o menos bien en el entorno en el que hemos evolucionado..."

    Si te he entendido bien, después de una investigación que lo constatase o no, nuestra reacción podría depender de nuestro contexto cultural, de la educación y/o valores que hayamos recibido, por supuesto, de nuestras experiencias anteriores, etc, que habrían conformado en nosotros determinados valores morales e incluso valoraciones morales que serían determinantes en nuestra reacción ante un dilema como el del tranvía. ¿Es así, es éso lo que quieres decir, José Luis?

    "Explicar eso, si es posible, no implica aceptar que tengamos que seguir esas reglas, claro."

    Sí, de hecho yo creo que ésto se ha dado muchas veces en las sociedades humanas anteriores, se seguían reglas o convenciones sociales que en ese momento eran aceptadas (y defendidas) pero llegado un momento en el que se intentaban explicar se podía dar el caso de que ya no eran tan aceptables esas reglas.

    ResponderEliminar
  12. Jose Luis, me vas a hacen pensar. No la solución que creo la tengo clara, pero sí la forma de contarlo. Me cuesta mucho escribir y ahora no tengo tiempo. Mañana te contesto.

    ResponderEliminar
  13. Feki:

    Bienvenido al blog.

    "Me parece que el dilema presenta dos opciones:

    1)Accionar el interruptor
    2)No accionar el interruptor

    A pesar de lo extraño que parezca, yo considero que la opcion 2) difiere de una posible option 3) equivalente a "no tomar accion"."

    Normalmente se entiende por "no tomar acción" el no hacer nada físicamente, desentenderse del tema, aunque eso tenga consecuencias graves. Es posible, también que "no hacer nada" se entienda como "no hacer nada distinto de lo que se supone que hay que hacer, y que está bien definido". Siempre son posibles varias interpretaciones.

    Rivas:

    Bienvenido también. Nada en el enunciado dice que estén amarrados a las vías. Simplemente están ahí de la misma manera que está la otra persona en la otra vía o en el puente desde donde se le puede empujar.

    tara:

    También bienvenida.

    En caso de indecisión, podría ser una solución, pero es tan buena o mala como lo es la indecisión. Si uno no sabe qué es lo mejor, echarlo a suertes debería ser igual de bueno o de malo que cualquiera de las opciones.

    Piensa esto. Si una de las dos opciones fuera mejor que la otra, echarlo a suertes será peor opción que la que se considera mejor.

    ResponderEliminar
  14. José Luis:

    "después de una investigación que lo constatase o no, nuestra reacción podría depender de nuestro contexto ..."

    Nuestra reacción será esa antes de que la investigación nos muestre eso. De hecho, lo que puede resultar de la investigación puede hacernos cambiar nuestra reacción ante estas situaciones. En realidad, cualquier reflexión puede hacernos cambiar, en principio, lo que nos dice el instinto o el condicionamiento cultural.

    Imagina que la investigación muestra que la razón por la que nos parece mejor "no hacer nada" se debe a que en tal momento de nuestra evolución, era, en general, una estrategia mejor y que tales situaciones no tienen que ver con la del dilema.

    Si podemos vencer mediante la reflexión nuestro instinto de no hacer nada, tal vez hagamos algo. Algunos instintos no es posible ignorarlos (como el de comer), pero otros sí (como el de la venganza).

    No sé cómo de fácil sería el de no hacer nada o el que sea que aplicamos. Cabría decir lo mismo si más que instinto es condicionamiento social.

    elena:

    No sé a qué José Luis te refieres. En cualquier caso, de eso se trata, de hacer pensar.

    Saludos a tod@s.

    ResponderEliminar
  15. Uich! Es verdad que estáis dos joseluises. Me refería a Ferreira puesto que es quien ha planteado el dilema y me había evadido un poco de las respuestas. Sólo me quedan un par de neuronas y andaban por donde andaban. La próxima vez especificaré un poco más.

    “Si podemos vencer mediante la reflexión nuestro instinto de no hacer nada, tal vez hagamos algo.”

    ¿y si nuestro instinto nos dice que hagamos algo y la solución sea tal vez no hacer nada?

    La cuestión está, como dice Feki, en decidir si aprieto un botón o no lo hago. Podemos imaginar que si apretamos el botón salvamos a 5 personas, pero también podemos imaginar que si lo hacemos matamos a una.

    La mayoría de las personas a las que he preguntado accionarían el interruptor en la creencia de que con ello estarían salvando a 5 personas, la víctima supongo que es lo que se suele llamar efectos colaterales. Lo curioso del asunto es que si sustituyes el interruptor por un individuo (lanzo a un tío sobre las vías del tren y lo detengo), la respuesta difiere. No hay muchos dispuestos a sacrificar a una persona, y no obstante la situación es la misma. Mato a una para salvar a 5. Somos capaces de accionar un botón pero no somos capaces de arrojar a un tío al tren.

    Es más. Si alguien desviara el tren se consideraría que con su acción ha salvado a 5 personas, y posiblemente se le felicitase, a excepción de la familia del fallecido claro, pero si lanzase a un tío sobre las vías, posiblemente se le juzgase por asesinato

    ¿por qué? Pues no tengo ni idea, pero se me viene a la cabeza la película de “el verdugo” de Luis García Berlanga. Podemos aceptar la condena a muerte, incluso aplaudirla, pero no podemos aceptar que quien aplica la condena se siente en nuestra mesa.

    Supongo que en fondo del asunto hay alguna razón tan peregrina como que eso de mancharte las manos de sangre es un poco asqueroso, en cambio apretar un botoncito es como más suave, más limpio, no pringa tanto y no salpica.

    ¿condicionamiento social? Tampoco lo sé. Lo que si se es que esta creencia en el mal menor es utilizada a menudo por los gobernantes ¿cómo explicar sino la invasión de Irak? Comenzamos una guerra en la que mueren personas para evitar el posible armamento nuclear que daría lugar a un mal mayor.

    ResponderEliminar
  16. @elena:

    "¿cómo explicar sino la invasión de Irak? Comenzamos una guerra en la que mueren personas para evitar el posible armamento nuclear que daría lugar a un mal mayor."

    Entiendo el sentido de lo que quieres decir, elena, pero me gustaria aclarar tan solo una cosa.

    Ya sé que me estoy saliendo del tema un montón, pero la razón para la invasión de Iraq no fueron la armas de destrucción masiva, esa fue la razón oficial que dieron Bush y su gobierno para justificarla.
    Tras siete años de invasión no han aparecido esos inmensos arsenales de armas de destrucción masiva que ponían en riesgo la seguridad mundial. De sobra sabía la Administración Bush que no las iban a encontrar.

    José Luis, perdona, por favor, mi off-topic total, pero no he podido evitarlo.

    ResponderEliminar
  17. elena:

    "¿y si nuestro instinto nos dice que hagamos algo y la solución sea tal vez no hacer nada?"

    Exactamente igual.

    Nuestra manera de imaginarnos la situación podrá, efectivamente, hacer hincapié en un aspecto y otro del dilema. Se trata de saber si estos aspectos merecen la consideración que les damos.

    La razón peregrina que apuntas debería tener alguna razón de ser, como las otras que se han apuntado, la de no hacer nada o la de maximizar el número de vidas salvadas. Tal vez sea cierto que no nos gusta eso, pero si descubrimos que no nos gusta por razones que tenían su sentido en un contexto que ya no se da, tal vez estemos más dispuestos a cambiar esas apreciaciones morales.

    ResponderEliminar
  18. José Luis:

    Es normal que en cualquier conversación salgan off-topics.

    ResponderEliminar
  19. No te estás saliendo del tema Jose Luis y ése es precisamente el asunto. Mientras el mundo debate sobre el hecho de si estaba justificada o no la invasión, a nadie se le ocurre discutir sobre si este fué un acto moral o no.

    Bajo mi punto de vista una guerra no tiene justificación aunque sea para evitar un mal mayor de la misma manera que pretar el botoncito y matar a una persona no está justificado por el hecho de que así he salvado a 5.

    Es como mirar el dedo y no ver la luna. Otro tranvía. Cuando se dejo caer la bomba atómica se justificó moralmente como otro mal menor. Hemos matado a muchos asiáticos pero así hemos conseguido parar una guerra que de seguro se habría cobrado más víctimas. Pretamos un botón y ¡zas! millones de víctimas colaterales moralmente justificadas.

    No se puede justificar lo injustificable ya sean 5 individuos o 6 millones. Al menos desde una perspectiva moral ¿no?

    ResponderEliminar
  20. elena:

    Cuando dices que "no hay justificación..." no estás más que señalando tus preferencias morales. Otro puede decir lo contrario. Solo podremos intentar entendernos apelando a principios compartidos y de los que se deduzca la conclusión.

    La guerra de Irak se podía poner, y podía ser verdad, como una opción contra un tirano. Incluso si hubiera salido mejor de lo que salió, las preferencias morales de muchos no hubieran estado a favor.

    Yo creo que gran parte de esa oposición se debe a que el elegir a ese tirano y no a otro era por gusto de un país y no por otra razón. Y aceptar que un país haga ese tipo de política, en general, nos parece mal, aún a riesgo de que a veces tenga buenas consecuencias. Es decir, que la regla "no derribar a un tirano solo cuando le conviene a x" tiene una razón muy buena detrás.

    Veamos, si no, en perspectiva, otras cosas que podrían hacerse:

    1.- Permitir una guerra a Rusia o a China como la de EEUU contra Irak.

    2.- Hacer las naciones democráticas una lista de todos los regímenes de sátrapas en el mundo y empezar por derrocar por la fuerza al peor de todos cada año.

    Lo primero no lo aceptaríamos. Lo segundo ya me atrae más.

    ResponderEliminar
  21. ”Cuando dices que "no hay justificación..." no estás más que señalando tus preferencias morales. Otro puede decir lo contrario. Solo podremos intentar entendernos apelando a principios compartidos y de los que se deduzca la conclusión.”

    No, lo que he indicado es que la moral es un arma de doble filo. Por un lado nos dice lo que está bien y lo que está mal y por otro justifica nuestras acciones. Mi moral me dice que si para salvar a mi hija tengo que cargarme a 5, pues voy y me los cargo porque como dijo no recuerdo quién “bueno es lo que es bueno para mí”. Un concepto un tanto relativo. Por ello necesitamos unos principios compartidos, de ello se ocupa la ética. Y un principio compartido es que matar está mal, y otro principio compartido es que la guerra es mala. Buscar situaciones alternativas a estos principios compartidos es tratar de justificar como bueno unos actos socialmente considerados como malos. Y el abuso que se hace desde el poder de esta doble moral no es ético.

    ”La guerra de Irak se podía poner, y podía ser verdad, como una opción contra un tirano. Incluso si hubiera salido mejor de lo que salió, las preferencias morales de muchos no hubieran estado a favor.”

    La guerra de Iraq fue una pantomima como es una pantomima la de Afganistán. Pero no es la guerra lo que critico, que una guerra sí se puede justificar, lo que critico es que se justifique desde un prisma moral para convencer a la población de que se está haciendo algo bueno cuando en realidad es lo de siempre: el pez grande se come al chico. Esa es la tiranía.

    ”Yo creo que gran parte de esa oposición se debe a que el elegir a ese tirano y no a otro era por gusto de un país y no por otra razón.”

    Corramos un túpido velo. Quienes pueden responderte a esa pregunta los tiene reunidos en Sitches en un hotel de 5 estrellas, o 6 o 7. En la novela “mil soles espléndidos” de Khaled Hosseini se explica quien pone y quita tiranos, aunque tienen un problema, que a veces te salen rana. Se maneja mejor a una masa acrítica que a una persona poderosa.

    “Y aceptar que un país haga ese tipo de política, en general, nos parece mal, aún a riesgo de que a veces tenga buenas consecuencias. Es decir, que la regla "no derribar a un tirano solo cuando le conviene a x" tiene una razón muy buena detrás.”

    Es sistema político de un país no es inmoral lo que sí puede ser inmoral son las actuaciones de ese sistema. Inmoral es la tiranía, venga de un dictador o de una democracia y tiranía es pretender imponer un sistema sobre los demás.

    ”Veamos, si no, en perspectiva, otras cosas que podrían hacerse:
    1.- Permitir una guerra a Rusia o a China como la de EEUU contra Irak.”

    China u Rusia saben que la comunidad internacional no se lo hubiese permitido, pero ¿ya no hablamos de moral? ¿verdad?

    ”2.- Hacer las naciones democráticas una lista de todos los regímenes de sátrapas en el mundo y empezar por derrocar por la fuerza al peor de todos cada año.”

    El peor enarbola la bandera de la liberdad bajo una doble moral más digna de estudio que el dilema del tranvía. Pero es como el primo de zumosol. ¿te animas?

    ResponderEliminar
  22. "Por ello necesitamos unos principios compartidos, de ello se ocupa la ética. Y un principio compartido es que matar está mal, y otro principio compartido es que la guerra es mala .Buscar situaciones alternativas a estos principios compartidos es tratar de justificar como bueno unos actos socialmente considerados como malos."

    No se trata de buscar principios alternativos, sino de ponderar esos principios, que podemos seguir considerando aceptables, con otros principios, también aceptable. Por ejemplo "liberar un país de un dictador" o "tener petróleo barato".

    Para unos, la ponderación llevará la balanza a un lado; para otros, a otro. He hablado largo y tendido sobre estas cosas en mis entradas con la etiqueta de "La razón moral".

    "El peor enarbola la bandera de la liberdad bajo una doble moral más digna de estudio que el dilema del tranvía. Pero es como el primo de zumosol. ¿te animas?"

    No sé a quién te refieres ni a qué quieres que me anime. ¿Corea del Norte? ¿A invadir ese país?

    ResponderEliminar
  23. Sin ánimo de terciar en la reflexión colectiva, creo que viene al caso recordar que el Tribunal Constitucional alemán anuló en febrero de 2006 el precepto de la Ley de Seguridad Aérea que permitía al ministro de Defensa ordenar el derribo de un avión secuestrado por terroristas para estrellarlo contra una ciudad; situación que a mi me parece un perfecto caso práctico del "dilema del tranvia".
    Quien sepa alemán no tendrá dificultades en encontrar la sentencia en la base de datos del BVerfGe; los demás tenemos que conformarnos con las informaciones de prensa, fácilmente localizables "googleando" las palabras clave.
    El argumento del TC alemán, en lo que aquí importa, viene a ser que "la protección de la dignidad humana es estricta y no puede abrirse a cualquier tipo de limitaciones", como lo sería permitir que personas totalmente inocentes se conviertan en meros objetos de una acción estatal de salvamento.
    Claro está que Alemania presenta la particularidad de que tiene prácticamente constitucionalizado el imperativo kantiano, que prohíbe utilizar a las personas como medios y no como fines (a través de la fórmula "la dignidad humana es intangible" que abre su Constitución); pero no es menos cierto que el argumento "el sacrificio de una vida salva muchas vidas" es el que han utilizado siempre los regímenes totalitarios y los terroristas.

    ResponderEliminar
  24. Solitarius:

    Bienvenido al blog. Terciar en las discusiones es algo a lo que animo a mis lectores. No te prives.

    Gracias por el dato. Es interesante que la ley alemana recoja explícitamente un criterio. Creo que los EEUU, en cambio, tras el 11S aprobaron dar poderes al presidente para que pudiera hacer justo lo contrario y derribar el avión.

    Además de lo ya dicho en la entrada e
    y en los comentarios, en cuanto a que las razones de fondo no suelen ser las razones a las que se apela (el número de vidas, el uso de estas como instrumentos), sino las consecuencias para la organización social, según están filtradas por nuestros instintos y condicionantes sociales, esta situación de los aviones me hace pensar en otra consecuencia más. Si está prohibido abatir el avión, el gobierno se ve obligado a buscar otro tipo de soluciones (algunas preventivas, tal vez) al no tener la solución "fácil" a mano.

    ResponderEliminar
  25. Yo creo que se trata de un dilema curioso,no accionarlo es lo que haria, moralmente reprochable sería detonar un avión inocente en su mayoría por defender una ciudad, poniéndonos en cualquier aspecto de una persona, es poco ético dañar la vida humana , lo malo es que un terrorista o un filósofo malvado no la tiene ya que se dedica a contradecir esta afirmación.Si se tiene una correcta idea en el asunto se debería salvar a gente del avión antes de tomar represalias , al mismo tiempo que acometer un desalojo en el edificio colindante .
    ¿Que opinan? en un caso extremo, espero que no deba someterme a la justicia alemana en este caso.
    P.Gutierrez 14.

    ResponderEliminar
  26. P.Gutierrez 14:

    Bienvenido al blog y gracias por tu comentario. Yo no me atrevería a dar una opinión tajante independientemente de la situación.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  27. Opino que la distinción está entre si son personas involucradas en el suceso o no lo son. Me explico: Si tenemos en un hospital a 6 personas que van a morir en un par de horas, y por la naturaleza de las complicaciones, una de ellas requeriría para su operación de todo el personal durante esas 2 horas, mientras que el resto podrían ser tratadas en plazos de apenas veinte minutos, lo lógico y moral sería salvar a las cinco personas que pueden ser tratadas simultáneamente.

    El resultado colateral es la muerte de una persona, la supervivencia de cinco. En el caso del tranvía, viene a significar que si al accionar el botón, conforme al funcionamiento de la vía salvamos a cinco pero matamos a uno, es ético; porque para desgracia de aquel estaba implicado en la situación. Mientras que si lo que hacemos es, como en el problema del hombre gordo, tirar a una persona que pasa por allí sobre la vía para que descarrile el tren, sería no moral, porque no es aceptable moralmente que los problemas que se le producen a determinadas personas deban sufrirlos terceros, salvo que el bien que se protege sea superior (por ejemplo, en vez de tirar a una persona tiramos un coche, la vida es superior a la propiedad, con lo que sería válido).

    Como podréis suponer, por tanto, desde este punto de vista sería moral derribar un avión para evitar que se estrelle estando secuestrado, pues desgraciadamente las personas secuestradas están implicadas en el ámbito del suceso. No sería lícito, sin embargo, si los terroristas exigen que se mate a diez personas ajenas al suceso para no estrellarse, matarlas para impedir el atentado, puesto que esto sería afectar a personas que están fuera del círculo del curso de los acontecimientos.

    Respecto del supuesto de los 10 soldados y el general, el caso en el que sería razonable salvar al general sacrificando 10 soldados es cuando sea razonablemente previsible que la supervivencia de este general va a salvar más vidas mañana en su ejército (por ejemplo, porque sea un genio militar reconocido, y estos 10 soldados muriesen defendiéndolo de un intento de asesinato por un grupo de infiltrados enemigos).

    O esa es mi opinión al menos ;-)

    ResponderEliminar
  28. Xaviar:

    Bienvenido al blog.

    Creo que aciertas en que la implicación es una parte importante para explicar por qué vemos distinta una situación de otra (los psicólogos, psiquiatras y neurólogos dirán si es así o no), pero no explica que tenga que ser así.

    Que exista la implicación me parece una aproximación para evitar las arbitrariedades que señalaba en el último párrafo de la entrada, pero recuérdese que las arbitrariedades no se daban en el problema, sino en nuestra percepción (acaso más realista) de lo que pueda ser el problema integrado en un contexto más amplio.

    ResponderEliminar
  29. Soy un gran fan del dilema del tranvía (y de los dilemas en general). El dilema se puede complicar mucho más. Y hay múltiples versiones que ponen en serios aprietos a aquellos que desde la primera y más simple visión (5 vidas contra 1) afirman que la respuesta es siempre la misma (sea bien salvar a los que son más, o bien no sacrificar nunca a nadie para salvar a otros)

    Por ejemplo: Asumamos que viene un tranvía, y va a atropellar a cinco personas, que están atadas a la vía. Pero puedes arrojar a alguien a la vía y detener al tren. Mucha gente teoriza que la respuesta ha de ser siempre, invariablemente, la misma. Pongamos cuatro supuestos:
    1) la persona que puedes arrojar, es Ghandi (o cualquier otra persona que consideres muy valiosa)
    2) la persona que puedes arrojar, es Hitler (o cualquier otra persona que consideres muy odiosa, pero en absoluto relacionada con el tren.
    3) la persona que puedes arrojar, es quien ató en la vía a los 5 individuos inocentes.
    4) la persona que puedes arrojar es el maquinista del tren, y los cinco individuos que estan en las vías calleron allí haciendo puenting.

    Las respuestas morales de cada uno variarán a cada una de esas respuests (y a muchas otras versiones del dilema). El tercer caso, por ejemplo, es el caso al que se enfrenta un francotirador en una situación de rehenes con un terrorista armado, cuando parece evidente que va a matarlos: cambia una vida por cinco, pero normalmente no se le considera inmoral, ya que el terrorista se puso allí por su propio riesgo, y es él quien amenaza a los otros cinco. Incluso, no veríamos mal arrojar a cinco personas al tren para evitar que muriese una sola (sería el equivalente a un francotirador disparando contra cinco terroristas con un rehén)

    El último caso sería por ejemplo equivalente a cuando enviamos a un equipo de rescate a salvar a cinco montañistas que están atrapados en la montaña: los cinco montañistas se metieron solitos en el embrollo. Pero ahora hemos de arriesgar la vida de alguien para rescatarlos. Nuestra respuesta moral es diferente si la persona que sacrificamos es el mecánico de las vías (o sea, un bombero), que si es un señor que pasaba por allí: nos parecería horrible que el Estado obligara a la fuerza a un ciudadano cualquiera a arriesgar su vida para ir a rescatar a cinco montañeros que están en un lío porque les dio la gana correr un riesgo. Sin embargo, no nos parece mal que el Estado obligue al bombero a hacer eso mismo, por un simple detalle: le pagamos para ello.

    ResponderEliminar
  30. el dilema del tranvia!!

    acionar el boton para salvar a 10 personas y DEJAR MORIR a una es una causa utilitarista (maximo bienestar al maximo numero de personas) moralmente es una accion "valida" ya que como e señalado en mayuscula DEJAR MORIR es una causa menor que matar a una persona (como seria el caso del cirujano al salvar sus pacientes). Las diferencias norales se encuentran si actuamos conforme a la utilidad (actuacion donde cualqueir caso desdde el tranvia, el cirujano que mata y tirar a un hombre gordo a la via para parar el tranvia, etc, estarian justificados moralmente ya que es mas util que muera una persona a q mueran 10) o si actuamos conforme a las libertades y derechos humanos donde los unicos casos acceptados moralmente serian aquellos donde el sujeto no esta afectado directamente , como en lo contrario son los casos del cirujano o tirar al hombre gordo. No estar afectado directamente equivale a que si accionas el boton esa accion no se hace con el proposito de matar a esa persona sino salvar a 10 mientras el cirujano el proposito es matar a la persona para salvar a diez. Se actua sigueindo un fin, no un metodo.
    Saludooooos!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No entiendo tu razonamiento final. El propósito en ambos casos es salvar a 10, que es el fin. El medio es la acción que causa una muerte.

      Eliminar
  31. Vamos, también se pueden otras opciones (si fueren posibles):
    - Descarrilarse con todo y tranvía (antes de accionar o no el bendito botón).
    - Accionar un freno.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  32. Hay un error en suponer que es lo mismo arrojar a alguien para descarrilar el tren y salvar a 10 personas que hay en la vía, que elegir entre atropellar a 10 o 1 persona. Y es distinto pensar en matar a 1 para donar sus órganos a 10. Y es distinto matar a un trabajador para salvar a 10 imprudentes o que los 11 sean imprudentes. Y es distinto que los 10 sean criminales que van a matar a 10 personas cada uno y el otro sea un inocente o que los 11 sean inocentes.

    En el caso de que seas el maquinista y veas a 1 imprudente en una vía y 10 en otra, debes de obrar como si condujeras un camión sin frenos, intentando atropellar a la menor cantidad de gente. ¿o acaso cambiarías un tren de vía para atropellar a 10 personas en vez de 1?

    En el caso de arrojar a alguien la vía para salvar a 10 o matarlo para sacarle los órganos estamos ante un dilema distinto. Hablamos ahora de asesinar a un hombre para salvar a 10 que iban a morir por accidente o por enfermedad, donde su asesino no somos nosotros. Tenemos la obligación de no matar, pero no de curar a los enfermos como si fuéramos Jesucristo.

    Y es injusto matar a alguien que no ha hecho nada malo para salvar a 10 imprudentes que son culpables de su propia muerte. Por supuesto, si hablásemos de 10 criminales y su salvación fuera la muerte de 100 inocentes, es mejor que no se salven.

    En resumen, matar inocentes para salvar vidas amenazadas por accidente o enfermedad está mal. Si tú eres el que va matar a esas personas forzosamente (conduces un tren a toda mecha) es mejor matar 1 que 10. Serías una asesino de 9 personas si optas por el accidente más grande. Y si tu no eres el maquinista sino un espectador, puedes hacer lo que quieras, no estás obligado a salvar a nadie, pero si cambias el tren de vía para producir un accidente menor en vez de uno mayor no te condenaría. Tampoco si no haces nada.

    Es como matar o no auxiliar. Es distinto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Espero que te estés dando cuenta de que la única justificación que presentas es tu propia opinión, como si fuera obvia. No lo es, y de eso va discutir sobre este tipo de dilemas. ¿Por qué "matar inocentes para salvar vidas amenazadas está mal" mientras que elegir entre vidas de inocentes está bien? ¿Acaso no son inocentes los amenazados?

      Yo he dado un ejemplo de explicación que podría ayudar a entender esos porqués. No sé si es cierta, pero da una idea de que podemos ir más allá de solo decir que tal cosa "está bien" y tal cosa "está mal".

      Eliminar

  33. Solución en:
    http://www.margencero.com/almiar/dilema-del-tranvia/

    ResponderEliminar
  34. Les propongo un dilema que me lo plantearon, vives en una ciudad ubicada en una ladera con riesgo de deslizamientos por precipitaciones fluviales, y tienes dos candidatos a alcalde de tu ciudad, uno que propone invertir todos los recursos en embellecer tu ciudad para un mayor flujo turistico y mejorar la situacion economica de la sociedad y otro que propone utilizar todos los recursos para mejorar e incrementar la infraestructura de seguridad urbana de modo que se puedan evitar posibles catástrofes, (el periodo del alcalde es por 5 años).
    el dilema: decides mejorar tu ciudad y tu calidad de vida con la posibilidad de que ocurra o no una catástrofe, o decides que es mejor vivir en una ciudad que pudiera estar mejor preparada para una catástrofe aunque signifique postergación al desarrollo y a tu economía.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me faltan datos. De todas maneras, este tipo de dilemas no tiene una solución, sino que cada uno expresará sus preferencias. Lo que plantean es más bien cuáles son las consecuencias de tener criterios de elección consistentes entre una situación y otra.

      Eliminar
  35. El problema está en proponer compensaciones algebraicas en el ambito de la moral, en donde la compensación a la inmoralidad solo lo puede hacer cumplir la sentencia del juicio. Los hechos de buena moral no compensan. Salvar una vida + matar una vida = 0 es falso, matar una vida + pagar por la vida matada = 0 , si. Asi las acciones deben de evaluarse en juicios individuales, en donde cada uno de los cuales tiene su veredicto. Asi decidir matar a 1 persona para salvar a diez debe de tomarse cómo un asesinato. En cambio no evitar matar a 10 personas porque la alternativa es matar a 1 es moralmente adecuado y no requiere contrapartida en justicia. Si el maquinista es responsable de la situación creada, puede decidir entre la inmoralidad de responsabilizarse de 1 muerte o de 10 muertes. Lo moralmente aceptable siempre será no hacer cargas morales.

    Moral-justicia constituyen un binomio, en donde en la columna de la moral solo se pueden apuntar deudas y en la de justicia pagos. Idealmente un 0 en la columna de la moral significa que la persona ha llevado una vida intachable en cuanto a la moral; prestar auxilio, ect ect.

    Otra cosa es que se quiera solucionar el dilema mediante criterios economicistas, pragmaticos, al gusto de consumidor. Pero el sistema moral-justicia, pese a su tosquedad en algunos casos, es bastante claro en el dilema y sus variantes.

    Saludos y visiten mi blog

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Estás diciendo que no te gusta el enfoque económico y prefieres el algebraico? Con el algebraico defines "sumas" que no son tales y hablas con naturalidad de "acción", "no acción" y "responsabilidad" como si fueran cosas siempre bien definidas y como si siempre actuaran en justicia o moralidad en la misma dirección. La literatura del dilema del tranvía está llena de casos en los que se ve que la gente no organiza de esa manera sus juicios morales, aunque usando solo unos primeros ejemplos así lo parezca.

      Eliminar
  36. Entiendo que el dilema del tranvía es un dilema moral, por tanto intento abordarlo desde la perspectiva moral. No creo que exista ningún dilema cuando se aborda desde el criterio economicista; que se limita a poner huevos que se rompen en lugar de personas que mueren.

    No establezco un modelo de decisión moral con la intención de que sea capaz de explicar las respuestas que dan las personas en cuanto estas son preguntadas sobre asuntos morales, esta seria la labor de un psicologo. Mi intento es fundamentar la filosofia moral, de modo que sea capaz de resolver estos dilemas. Los criterios de la moral no son democráticos, ni están sujetos al devenir de los tiempos; son universales. Es un asunto filosófico; porque la moral nació cómo concepto filosófico u religioso y este sigue siendo su nicho. No es posible pervertir el término con injerencias economicistas ni de practicidad de la vida diaria, eso ya no es moral, es otra cosa.

    En la práctica el álgebra entre las deudas de la moral y los pagos de la justicia no es aritmética exacta; aunque la Justicia debería ser lo suficientemente imaginativa como para minimizar este problema, cuyo pilar fundamental siempre tendría que ser la simetría.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "Mi intento es fundamentar la filosofía moral". "Los criterios de la moral son universales".

      Ya veo que quieres ser un Kant. Suerte. Él no lo consiguió y tú tampoco lo harás, sencillamente porque es imposible. La moral se basa en las preferencias morales variadas que tenemos cada uno y entre todos. Los aportes de la psicología, la biología,... y la economía deben ser bienvenidos cuando ayudan a desenredar el problema.

      Eliminar
  37. En el momento en el que se monta un dilema moral en torno a una cuestión que no tiene ningún dilema moral, poner un poco de orden en el desaguisado parece "fundamentar la moral", para corregir la impresión que ha podido dar esa expresión te diré que no tengo ninguna pretensión de sistematizar la moral. Fíjate que solo he expuesto un teorema que permite manejarnos con el problema. Para diseñar edificios no hace falta saber que el acero no es un medio continuo, incluso herramientas toscas permiten solucionar problemas. Evidentemente a un nivel de resolución alto el juicio puede ser nublado, pero el error será siempre del orden de unos gramos al pesar kilos de patatas.

    No hay "preferencias morales" al menos no hasta un nivel de resolución suficientemente alto, es un corpus platonico. Del mismo modo que no hay "preferencias taxonómicas", y la ordenación de las especies es mas o menos objetiva una vez establecidas las normas de organización, y es posible cazar cualquier disparate. Ahora si aceptas que el asesinato de un inocente deja de ser inmoral segun preferencias morales, ve al punto marcado en**

    Dicho esto, ¿qué tipo de problema entiendes tu que es el dilema del tranvía? Si entiendes que es un problema moral entonces utiliza los criterios de la moral. Si entiendes que es un problema psicológico entonces utiliza los criterios de la psicología. Si entiendes que es un problema de economía utiliza sus criterios y si crees que es un problema de la vida real, pues atiende a los postulados del modelo de la vida real. Pero respete los juegos y sus normas. **Ahora si crees que la moral es subjetiva a tal grado que no es capaz de plantear las normas de un juego, pues entonces lo propio es abandonar la pretensión de solucionar y plantear problemas morales.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No quieres fundamentar la moral, solo quieres buscar una racionalización de lo que tu intuición te dice que debe ser el caso. Lo que llamas teorema no es tal y, si lo formalizas, lo será en tu sistema formal. Que ese sistema se corresponda con los problemas morales a que lo quieras aplicar es solo un deseo por tu parte.

      Dices que no hay preferencias morales, pero eso es justamente lo único que hay. Por lo menos yo tengo las mías, muy reales. Y en ninguna parte he visto que la categoría moral de un acto sea observable como lo es el peso de un cuerpo, por ejemplo.

      Es a partir de ahí que podemos trabajar y usar el hecho de que tenemos algunas preferencias parecidas, que estamos dispuestos a razonar y a llegar a compromisos.

      Eliminar
  38. La intución esta involucrada incluso en realizar una suma aritmetica, siempre estará presente pues es una propiedad del funcionamiento de nuestra psique; tus dos primeras frases son tautologias. Lo del deseo es un regalo tuyo.

    Dices que la moral es subjetiva, pero te permites resolver problemas morales, quieres estar a las duras y a las maduras, y no se puede Tampoco respondes a ninguna de las preguntas que he planteado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No pretendo resolver problemas morales en el sentido de dar con la respuesta objetiva a cada problema. Pretendo mostrar la mejore manera en que podemos entendernos cuando hablamos de problemas morales.

      Creo haber expuesto mi postura de manera suficientemente clara y extensa para responder a las preguntas. Por ejemplo, un de ellas era:

      "¿qué tipo de problema entiendes tu que es el dilema del tranvía? Si entiendes que es un problema moral entonces utiliza los criterios de la moral. Si entiendes que es un problema psicológico entonces ..."

      Creo que queda claro que mi postura es que los problemas morales no se conducen independientemente de la psicología (o la economía o la física), que no existen criterios morales objetivos para resolverlos y que necesitamos esos otros contextos para poder analizarlos y hablar sobre ellos (y, si llega el caso, ponernos de acuerdo por lo menos en unos mínimos).

      Eliminar
  39. Pues yo le preguntaría al gordo si se quiere sacrificar y si no yo saltaría esperando lograr un cambio. Pues el dilema es demasiado intenso como para sobrevibirlo.

    ResponderEliminar
  40. Bueno y que tal si cortamos la corriente del Tranvía? O mejor aún le pedimos a Dios que lo detenga? Aquí la cuestión es muy simple...a cada quien le toca vivir la vida conforme a su diseño, la gente vive y muere, los problemas vienen y van, así será todo mientras seamos imperfectos, amen.

    ResponderEliminar
  41. mas complejo son 10 mujeres y la otra persona es solo un hombre

    ResponderEliminar
  42. https://www.youtube.com/watch?v=-N_RZJUAQY4

    Les adjunto el enlace a un video que he visto recientemente sobre el asunto. Es la solución que le da un niño de dos años. Posiblemente el niño se limitaba solamente a jugar, pero me hace pensar que si a un individuo racional llega a importarle mas el hecho de sentirse que ha sido injusto, y por su accion o no accion inevitablemente va a morir alguien, que el valor propio de la vida (ajena, claro ),puede que la solución del niño no sea ta irracional.

    ResponderEliminar
  43. El dilema ya tiene solución:

    https://www.google.es/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=6&cad=rja&uact=8&ved=0ahUKEwidpZi-nczPAhWiOsAKHZnMD-8QFgg7MAU&url=http%3A%2F%2Fwww.margencero.com%2Falmiar%2Fdilema-del-tranvia%2F&usg=AFQjCNEzFDpiWIa0KVip-4Z54H6KJa5QNg&sig2=X1qjT9ndacKSxo5c-FL-nQ&bvm=bv.135258522,d.d24

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De ninguna manera eso es la solución. De hecho, al plantear la discusión en torno a principios sobre la naturaleza de cada hecho y detalle del problema se aleja de la posibilidad de encontrarla.

      Eliminar
  44. Hola José Luis:

    tantas opciones como conclusiones y éstas se van reproduciendo hasta lograr un planteamiento arbóreo.

    Esto me recuerda a la respuesta de Gerd Krumeich, historiador alemán respecto al recurso de la guerra, dentro del contexto de la primera guerra mundial:

    ¿Cree que la guerra debería ser siempre el último recurso?
    Como dijo Clausewitz [militar e historiador prusiano], «la guerra es la continuación de la política por otros medios». Y si la política no consigue frenar a un Hitler o a un Sadam, entonces se podría seguir de otra manera. Si Francia y Reino Unido hubieran combatido verdaderamente a Hitler en 1939, tras su declaración de guerra, le habrían derrotado. Esto es, para nada estoy en contra de los intentos de apaciguamiento, pero los dictadores deben saber también que corren el riesgo de perder su poder y su vida.

    Esta respuesta me hace plantearme respecto a los criterios puristas, a las verdades univocas... no las hay (como diría Antonio Escohotado).

    Cuantas más versiones/opciones tienes, menos sabes y más inabarcable es la realidad.

    Dentro del marco de que cualquier opción es posible, lo importante es la gestión de las decisiones y la congruencia de los hechos (como ensablamos el dicho y el hecho, cómo vinculamos las opciones posibles, como nos contradecimos, etc. Eso es lo verdaderamente interesante darnos cuenta de cómo no llegamos a solucionar nada).

    Un poco también en la linea de tu pensamiento sobre las ideologias y como afectan a la economía. Si eres lúcido te darás cuenta del dato que manejas y como tu tendencia/creencia te maneja.

    ResponderEliminar
  45. Falso dilema. Bajo ninguna circunstancia puede ser ético sacrificar a una persona inocente. Lo que sí puede resultar es conveniente. Quienes ven un dilema confunden ética (absoluta) con conveniencia (relativa).

    Podemos considerar convenientes multitud de acciones que contravengan la ética. Pues nada, los perpetramos y pasamos por caja; lo que no podemos pretender es que el beneficio particular torne ético o impune lo que no es.

    En este caso concreto, si por lo que sea estimo conveniente que muera una persona antes que diez, la mato, pero a sabiendas de que luego deberé ser procesado por homicidio. Porque si ser héroe -suponiendo que alguien lo considere heroicidad- saliera gratis... menudo chollo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No entiendo lo de "falso dilema". El experimento mental propone un dilema cierto: hay que elegir entre dos alternativas. No puedes negar eso. Tanto la entrada como los comentarios muestran que eso que tú crees que debe ser el caso para toda persona ética, simplemente no se cumple. Aparte de eso, no das argumentos de por qué nunca es ético sacrificar una persona inocente. Nunca para ti? debiera serlo para todo el mundo? por qué? cómo pruebas eso?

      Eliminar
    2. Quiero decir que no se trata de un genuino dilema ético (en el caso de que los hubiera). Simplemente no es ético matar impunemente a un inocente. Cualquiera que lo haga, con independencia de las razones que le muevan a ello, debe ser procesado por homicidio o asesinato (según las circunstancias).
      Puedo demostrar lo que digo y puesto que te interesa lo haré. Me baso sin ir más lejos en el imperativo categórico kantiano, es decir, en la determinación de la única legislación universal, simétrica, necesaria y consistente posible: quien ataque a una persona pacífica debe ser proporcionalmente castigado sin excepción.
      Nadie puede rechazar este principio sin mostrarse éticamente partidario del privilegio y la agresión, lo que a su vez estaría obligado a justificar racionalmente de alguna manera. Creo que negar esto supone simplemente negar la posibilidad de la ética.

      Eliminar
    3. Supones mal:

      1. El imperativo categórico de Kant no tiene por qué ser aceptado. Es cosa de Kant y de aquellos a quienes Kant convenza.

      2. El imperativo categórico de Kant no está bien definido. Hay muchos ejemplos donde no está claro qué es lo que manda el imperativo categórico. Para empezar, distintas personas pueden opinar distinto de lo que sería una buena legislación universal.

      3. Del imperativo categórico de Kant no se deduce que quien ataque a una persona pacífica debe ser proporcionalmente castigado sin excepción.

      4. Quienes opinan que en alguno de los experimentos mentales del tranvía sí es ético sacrificar a una persona en favor de diez lo justifican a su manera.

      5. Parece que dices que esas otras justificaciones no son racionales. Pero es que la ética no se puede deducir de la razón, mal que le pese a Kant.

      6. Lo anterior no implica negar la posibilidad de la ética. Solo implica que no se deduce de la razón. Se puede ser perfectamente ético sin ello.

      7. Dicho de otra manera, yo puedo coincidir contigo en muchas valoraciones éticas (incluso en todas). Tú crees que las deduces de la razón. Yo no. Eso no las hace menos éticas.

      8. Sí es posible usar la razón para encontrar consistencias e inconsistencias en ciertos planteamientos morales con relación a otros. Ese es el buen uso de la razón.

      9. Echa, por favor, un vistazo a mis entradas etiquetadas como "razón moral". En ellas hablo largo y tendido, amén de debatir con lectores, sobre todo esto.

      Eliminar
    4. ¿Que la ética no se puede deducir de la razón? De piedra me dejas. Se puede mostrar un comportamiento ético de manera espontánea, emocional o instintiva, pero ¿cómo saber que lo es sin someterlo a un análisis racional? ¿Porque deriva de la cultura, la genética, la religión, la política… o simplemente la corazonada o el capricho? ¿Por eso un comportamiento deviene ético? Si eso piensas no sé por qué planteas debates sobre dilemas morales cuando bastaría con acudir a la indiscutible –ya que la discusión racional te parece inapropiada- fuente autorizada para resolverlos.
      Lo cierto es que la ética como disciplina conforma una parte de la filosofía que trata de fundamentar racionalmente la conducta; empeño absurdo en tu opinión ya que el comportamiento debido tendría otra inspiración que no explicas. Pero a continuación te contradices afirmando que la razón sí puede servir para rechazar planteamientos morales inconsistentes. Entonces, por amor de Dios, aclárate: ¿tiene o no algo que decir la razón sobre cuál debe ser el comportamiento correcto?

      Eliminar
    5. No es mi intención dejarte de piedra. Aclaremos un par de cosas que veo mezclas en tu comentario.

      -Hay razones (las sepamos o no) de por qué un comportamiento es juzgado como ético por alguien (muchos o pocos).

      -Los hechos no son éticos, sino éticos para A o para B. No hay nada en un hecho que lo haga ético en sí mismo. No hay una manera de interactuar con un hecho que me dé su valor ético intrínseco (como sí hay manera de conocer la carga eléctrica del electrón, por contraponer un ejemplo). La ética está en cómo valora el hecho un sujeto, no en el hecho.

      -La ética saldrá de donde sea (una mezcla de las causas que has apuntado y algunas más), podremos querer cambiarla o lo que sea, incluso podremos querer deducirla de la razón. Lo que pasa es que esto último nadie lo ha conseguido. ¿Dónde está el código civil deducido de la razón? No existe ni el primer artículo.

      -Deducir la ética de la razón (a partir de algún grupo de axiomas) es distinto que usar la razón para hablar sobre ética. Que la razón pueda tener algo que decir en la ética es cosa distinta que deducir la ética de la razón. No hay contradicción. Por ejemplo: yo puedo señalar con la razón la inconsistencia en aceptar que (i) todos los seres humanos tienen los mismos derechos, (ii) las mujeres son seres humanos y (iii) las mujeres deben tener menos derechos que los hombres. Y puedo señalar la inconsistencia sin haber dicho nada acerca de dónde salen (i) y (ii).

      -Por supuesto, señalar que hay distintas posiciones éticas ante un hecho no implica aceptarlas como válidas. Mi posición ética no es "si la mayoría piensa que X es ético entonces pienso que X es ético", si yo creo que X no es ético, puedo seguir pensándolo y oponerme a la mayoría.

      Eliminar
    6. El relativismo ético es en sí mismo una ética inconsistente e incapaz de solucionar ningún conflicto de valores. Una especie de absurda e inmoral “moral” del más fuerte.
      Deduzco de tus palabras que al no existir criterio objetivo para dilucidar entre diferentes morales, habrá que resolver el asunto a palos. Entonces, si niegas la ética, debo entender que planteas dilemas morales para tratar de demostrar mediante su supuesta irresolubilidad la ley del más fuerte.
      Eres una suerte de nihilista ético y deberías de reconocerlo sin rodeos (apelando al menos a la mínima honestidad intelectual para debatir)
      Pero, aun creyendo en la ley del más fuerte ¿qué pasa cuando la fuerza está equilibrada y simplemente no existe el-más-fuerte? Los iguales deberán negociar y buscar lo más objetivo y razonable. DEBERÁN DEDUCIR UNA ÉTICA DE LA RAZÓN.
      Dices que nadie lo ha conseguido, pero de hecho cualquier comportamiento ético es necesariamente razonable y ya Kant dedujo impecable y formalmente la ética de la razón. Deberías leerlo.
      Cualquier código civil y penal es ante todo razonable y no arbitrario o revelado. No entiendo cómo puedes negarlo.
      Cuando admites que la razón puede rechazar comportamientos inconsistentes estás reconociendo que se puede deducir la ética a partir de al menos un axioma: toda ley moral debe ser consistente (además de universal, simétrica y necesaria)

      Eliminar
    7. No sé a qué estás llamando relativismo ético, pero por lo que dices no se refiere a lo que yo estoy diciendo.

      "Deduzco de tus palabras que al no existir criterio objetivo para dilucidar entre diferentes morales, habrá que resolver el asunto a palos."

      Deduces mal. Podemos resolverlo llegando a compromisos.

      "Eres una suerte de nihilista ético y deberías de reconocerlo sin rodeos."

      Nones. Yo tengo mis convicciones éticas y morales.

      "Cualquier código civil y penal es ante todo razonable y no arbitrario."

      Estás confundiendo "ser razonable" con "deducir de la razón". A está a favor del aborto en cualquier caso. B está en contra en todos. A y B son razonables y llegan a un compromiso: se permitirá el aborto en los casos tal y cual. No han deducido esa regla de la razón. De hecho, cada uno podrá seguir pensando que su posición es la mejor, a pesar de haber aceptado el compromiso.

      Aceptar la consistencia de las normas no implica que puedas deducir estas normas. Puedes tener un sistema u otro, ambos consistentes y que aceptan y rechazan distintas cosas. El axioma no te permite deducir que uno u otro sean el "verdadero". Solo te lo permite tus propias convicciones morales.

      Eliminar