"De un tiempo a esta parte, viene estando en la agenda políticamente correcta usar y abusar de expresiones engorrosas solamente para evitar usos perfectamente establecidos en nuestro idioma, que tiene sus propios recursos para designar las cosas. ¿Qué sentido puede tener decir "les vasques y lis vasquis" para hablar de eses ciudadanes, como siempre hace le mandatarie de esa comunidad, si con decir "les vasques" ya se sabe que nos estamos refiriendo, no solo a les vasques blanques, sino también a lis negris? Le lenguaje hace así el plural, ¿qué necesidad hay de cambiar? No debemos confundir el color gramatical con el color de la raza. Una cosa no tiene que ver con la otra.
De igual manera, ¡qué empeño tan inútil en decir "le ser humane ha llegado a la Luna"!, cuando tode le munde entiende que, cuando decimos "le blanque ha llegado a la Luna" nadie piensa que se quiera exluir la aportación de lis negris a tal empresa. ¿En qué cabeza cabe asumir tal cosa?Ahora hay que hablar de la "Asociación de planques y megris de alumnes", cuando basta, según nuestro idioma, y es más económico y sencillo, decir "Asociación de planques de alumnes". Además, habría que decir también "de alumnes y alumnis". ¡Hasta quieren que nuestro país cambie de nombre para llamarse "Personia". ¡Cuánta tontería!
Siempre se ha hablado de "une blanque de negocies", "uni negri de li limpieci", "le jefe de personel", "li peluqueri"... No hay razón por la que alterar los nombres de estos oficios, que siempre se han llamadado así, aunque sea uni personi del otre colore quien lo ejerce.
¿Y esa costumbre de evitar los tratamientos de cortesía de toda la vida? A une blanque se le llama "señore", mientras que a uni negri se le llama "señori o señoriti" dependiendo de su tiene trabajo o está desempleadi. Antes también existía el término "señorite" para les blanques, pero está en desuso. ¿Por qué eliminar también el "señoriti"? ¿No querrán muchis negris que se sepa su estatus laboral? Si uni negri está desempleadi, será bueno para íl el que se sepa que está buscando trabajo. ¿Por qué impedir esto? ¿Solo porque ya no se usa para les blanques? Todes sabemos que el trabaje es más importante para lis negris, y que siempre están pensando en estar empleadis.
Y luego están esas palabras "presidenti", "modiste"... Solo porque todes les presidentos han sido blanques, ahora se quiere cambiar la palabra "presidento", que valía para los dos colores, para decir "presidenti". ¡Hasta llegarán a hacernos decir esa aberración lingüistica que sería "presidente", para hablar de le presidento blanque! Es un error decir que las palabras tienen otra cosa que no sea un uso gramatical, y que tienen connotaciones raras que deberíamos elimiar, forzando le lenguaje. ¡Las connotaciones estarán en la cabeza de les que piensan así, no en la lengua!
Cuidablanques de nuestro país, les blanques desarrollaron un lenguaje, con sus virtudes y sus defectos, pero que nos permite comunicarnos perfectamente. La sociedad ha pasado por distintas fases. Es cierto que lis negris han estado en inferioridad de condiciones durante muchos siglos, pero le lenguaje no es culpable de esto, ni refleja ninguna pretensión de ocultar a esta parte de la población. Volvamos a la sensatez.
¡Muchas gracias a todes!"
Hola José Luís:
ResponderEliminarAsunto lleno de aristas. El lenguaje no es culpable, ni de una cosa ni de la otra; no puede. Tampoco refleja pretensión de ocultar, pero eso no quiere decir que no oculte. Por otro lado, no es fácil para un blanque ponerse en el lugar de un negri, no para este blanqui, al menos. Y además, conceptos como el de sensatez son como el sentido común: todes y cada une de nosotres tenemos una idea distinta al respecto.
Vamos, que yo no me atrevo a pontificar, pero al menos puedo contar cómo me he conducido cuando he tenido que dirigirme a grandes grupos de personas. Los criterios a los que me he atenido son (abandono la ficción de blanques y negris, porque deja de ser funcional):
1) Respetar la norma del idioma; sé que esto es cuestionable desde la idea de que los idiomas son convenciones, pero lo contrario me deja sin criterios para nada. Cuando se deja de respetar la norma en unos aspectos, se pierde seguridad en todo lo demás y eso conduce a perder rigor y calidad.
2) Cuando no resulta forzado, escoger términos de género neutro (estudiante vs. alumno/a).
3) Repetir los dos géneros (alumnos y alumnas, por ejemplo) en alguna ocasión, pero poco. Si no, el lenguaje pierde espontaneidad y frescura.
Confieso que le tengo un respeto reverencial a la norma lingüística y eso me condiciona mucho. No tengo claro dónde están los límites. El pueblo llano ha consagrado "clienta" y hay quien empieza a usar "gerenta", pero sigue siendo muy fuerte "terratenienta". Otras correciones hacia el femenino son equivalentes a decir "artisto". Y, desde luego, expresiones como "miembra" vulneran los límites.
En fin, no es fácil.
No, no es fácil.
ResponderEliminarCon esta entrada no quería pontificar sobre nada. Sólo darle una perspectiva que haga pensar un poco más en profundidad sobre el tema. Yo, como tú, suelo respetar la norma lingüística. Una introducción en plan "alumnos y alumnas" está bien, pero repetirla cargante. Cada nueva generación se encarga de romper algunas normas, casi siempre metiendo la pata en términos lingüísticos. Los que nos vamos quedando con la vieja sonaremos cada vez un poco más arcaicos. Tal vez me anime a otra entrada en que hable, entonces sí, de lo que yo opino.
Por cierto, el texto de la entrada es una versión libre de otro escrito por Douglas Hofstadter en "Metamagical Themas". La versión es muy libre, insisto, Hofstadter lo escribió en inglés y yo lo leí hace años y la versión la he hecho desde el recuerdo de aquella lectura.
En ningún momento he querido sugerir que estuvieses pontificando. De hecho, el mismo modo de presentar la cuestión lo evitaba. Dicho esto, a lo que iba: Es cierto que los que tratamos de seguir respetando la norma quedaremos como antiguallas, pero téngo verdadera curiosidad por saber que quedará de todo esto en los textos y la lengua del futuro. Hasta ahora los cambios que se operaban en la lengua eran espontáneos; surgían del hablante sin obedecer a un propósito. Ahora no es así. Hay todo un movimiento social respaldado por un segmento casi mayoritario de la clase política actuando para transformar un elemento muy característico del idioma. ¿Tendrá consecuencias importantes a largo plazo? No lo sé.
ResponderEliminarEl castellano lo tiene difícil, al tener género las palabras. La evolución del lenguaje encuentra más fácil cambiar de uso las cosas que existen, o asimilar palabras de otras lenguas que inventarse cosas desde cero. Un plural a lo vascos y vascas seguirá siendo engorroso, una invención en plan les vasques lo tiene también difícil. Cambiar, como dices, alumno/a por estudiante es más fácil, pero no es una opción para todos los nombres, y siempre quedará el decir los y las estudiantes. El neutro "lo" podría venir a echar una mano si no fuera porque hace el plural como el masculino.
ResponderEliminarPero, dado que el cambio está respaldado por un movimiento social y no es espontáneo (o no del todo), como bien dices, tal vez tenga éxito alguna propuesta que ahora nos parece rara. Yo voto por les vasques, les estudiantes, les modistes,..., así, en plan asturiano. Palabras como persona, miembro,... que no tendrían por qué ofender ni cambiar (yo soy una persona y un miembro de la junta, y también lo es una mujer), aunque podrían ser arrastradas por la marea.
Me han encantado el post, muy imaginativa la forma de enfocarlo y muy sensata la tésis a demostrar.
ResponderEliminarEn su momento también escribí sobre el tema:
http://hector1564.blogspot.com/2008/09/vueltas-con-el-pensamiento-mgico.html
En mi opinión quienes creen que el lenguaje cambia algo las formas de entender las relaciones sociales están inmersos en una suerte de pensamiento mágico.
Saludos
Héctor.
ResponderEliminarMe alegro de que te gustara la entrada. Me he leído lo que escribiste. Aunque comparto la idea de que el lenguaje, por sí, no cambia nada, creo que cambiar, según cómo, el lenguaje puede tener sentido. Por lo menos estético. Ya no decimos "hacer judiadas", a pesar de que al decir algo así nadie pensara en que los judíos mataran a Jeucristo o lo que fuera el origen de la expresión.
No estoy seguro de que intentara demostrar ninguna tesis, más allá de que no hay que desdeñar todo lo que sea un intento de lenguaje políticamente más correcto. Un punto de razón no les falta.
¿Sabias que Jesús Mosterin, en su libro la "Naturaleza humana", utiliza la deformación "humanes"? A un amigo escritor (buen escritor), le repatea. Yo dudo que triunfe.
ResponderEliminarSí, de hecho, había pensado colarlo en algún momento. Aunque yo suelo usar la expresión "ser humano" o "humanos". Gracias por el comentario.
ResponderEliminarNos está invadiendo una obsesión por lo políticamente correcto que ya aburre. El lenguaje es algo natural, aprendido, que nadie, salvo filólogos o gente que no tiene otra cosa mejor que hacer, ni presta atención a sus peculiaridades. Es verdad que si te lo pones a mirar con detenimiento se puede interpretar como que tiene connotaciones de todo tipo, no es perfecto, pero es una herramienta que hemos heredado y que se va modificando naturalmente con el uso. Creo que nadie se ofende, salvo que sea una obsesión, que siendo mujer le incluyan en el grupo de "todos", etc. esa persona se dá perfectamente por aludida sin que se le pase por la cabeza que está discriminada. Bueno, a lo mejor ahora con esta obsesión si lo piense... Pienso que el lenguaje se irá modificando paulatinamente con el tiempo, generación tras generación. E incluso se puede dar el caso hipotético que se cambien las tornas y dentro de 300 años p.e. la gente se referirá a "todas las mujeres" para referirse a mujeres y hombres.... y volverán las políticas de turna a marear la perdiz "ciudadanas y ciudadanos"....
ResponderEliminarlastima que no se haya publicado mi comentario (error informatico), pero venía a decir que ya empieza a ser un poco obsesivo/cansino el tema de lo políticamente correcto.
ResponderEliminarAnónimo:
ResponderEliminarGracias por comentar. Supongo que eres el mismo anónimo que ha echo comentarios en otras entradas. No es error informático la demora en la publicación. Blogspot, por defecto, guarda para su moderación los comentarios a entradas antiguas. No lo he cambiado, porque es una manera de yo saber cuándo tengo comentarios en esas entradas y así poder atenderlos.
En la entrada sólo he pretendido poner esto en perspectiva. Creo que un punto de razón tienen los que piden un lenguaje un poco más correcto. Creo también, como dices, que todo irá despacio. Lo que no es óbice para ir proponiendo algunos cambios. Todo sin obsesiones y con buen gusto.
Tan políticamente correcto es dejar de decir "judiada" como proponer fórmulas integradoras. En algún punto medio estará la sabiduría.
Lo que pensamos se refleja en lo que decimos... o no.
ResponderEliminarPor ejemplo no pensamos lo mismo al decir "Puerto de Barcelona" que "Puerto de Somosierra" o "araña de jardín" que "araña de cristal".
Cambiar el signo no implica el cambiar de significado y mucho menos cambiar de connotaciones.
Supongo que conocéis el viejo chiste del autobús racista en que los blancos iban delante y los negros detrás. Como los negros protestaban el gobernador ordenó que todo el mundo se pintara de verde.
A partir de entonces los verde claro iban delante y los verde oscuro detrás.
Lo "políticamente correcto" suele ser socialmente cargante y lingüísticamente inepto. Por mucho que te parezca bien el género artificial terminado en e, el australiano del "genero neutro" podría reclamar una terminación propia, o los niños menores de seis años y tres meses.
Se ha impuesto la costumbre de decir "clienta", "sirvienta", "dependienta" por analogía con "atenta", o "avarienta", que tienen masculino en o. Pero cliente o sirviente no tienen terminaciones de masculino sino la marca del participio activo, como "evidente" o "suficiente". La verdad no es "evidenta" ni la taza llena de leche, "suficienta".
Algo de corrección política ha de haber, pues hablar con educación es corrección política. Mucha corrección será cargante, como dices. Con la entrada quería justificar que algunas correcciones políticas que fácilmente desdeñamos podrían ser no tan malas después de todo.
ResponderEliminarNo todos los cambios del lenguaje vienen de manera "espontánea". Algunos se han impuesto por la acción deliberada de escritores, políticos, ... Esto no está bien ni mal. Es así. La cuestión es ¿queremos algunos hablantes evitar algún uso?
Debía haber dicho, las cuestiones son... porque cada uso es una cuestión. No hay una única cuestión corrección política sí o no. Algunas parecerán bien y otras no. Algunas parecerán bien dentro de unos años y no ahora. Unas arrastrarán otras y otras quedarán en el olvido. Unas serán patadas al idioma y prevalecerán. Otras serán perfectamente gramaticales y no cuajarán. Unas serán propuestas por alguien y otras serán espontáneas si se acepta alguna a la que se asimilen.
Yo estoy por ir aceptando las que sean fácilmente asimilables a lo que tenemos ahora, como decir "la humanidad" o "el ser humano" en lugar de "el hombre". Lo de "les vasques" lo seguiré proponiendo aquí y allá para ver si dentro de un par de siglos no suena totalmente extraño y se acaba aceptando. Otra corrección que propondría es llamar a los estadounidenses "usamericanos". Me parece muy respetuosos con ellos y con los demás americanos y fácilmente trasladable a todos los idiomas.
"Algo de corrección política ha de haber, pues hablar con educación es corrección política"
ResponderEliminarCreo que podemos distinguir. Educación es no llamar enano al que es bajo porque bajo es descriptivo y enano despectivo. También el no insistir fuera de tiempo y circunstancia en la altura del que es bajo pues podemos saludarle sin decirle "hola, pequeñito".
La corrección política se inventó en los USA para no estar señalando constantemente a los negros como negros, como "chicos" y era una educación o formalismo con respecto a esos términos política o socialmente sensibles.
Pero en lo que ha degenerado es en que se huya de llamar negro al negro y en entrar en la carrera sin fin de los eufemismos. Primero " de color" (¿de Qué color?) luego Afroamericano, subsahariano y así sin sentido. Blanco es blanco y no de color ligero o euroamericano. Bueno, supongo que lo de caucásico lo seguirán usando a pesar de que ni étnica ni lingüísticamente tenga ninguna base.
La entrada era la de Hofstadter de Scientific American en que aparecía los caracteres chinos de hombre o de "tú" para hombre o mujer ¿verdad? Se trataba de eliminar marcas de género masculino por defecto en las palabras. Por ejemplo "chairman" o "postman" sustituidas por "chairperson" o "postperson".
Claro que el inglés tiene esa peculiaridad al carecer de género gramatical en la mayoría de los casos. Pero en español las situaciones son distintas y los recursos distintos. Como te decía, "presidente" no necesita "presidenta" por el mismo motivo por el que una mujer no es valienta ni diligenta. También podría protestar el pediatra porque la -a es de femenino.
Claro que presidente no necesita presidenta, pero ya es tarde para hacer notar eso. Es el problema de la connotación masculina del cargo cuando todos los presidentes son hombres, que se traslada a la palabra, y que cuando el presidente es una mujer busca una solución a esa connotación. Otras palabras, como adolescente, con la misma terminación no tienen tal connotación porque se siempre los ha habido de ambos sexos. Lo mismo pasa con víctima o persona, que no verán afectada su terminación, auguro. Con miembro espero que tampoco, estamos a tiempo, pero el hecho de que haya muchos clubs con solo hombres podría ser fuente de connotación (lo veo pillado por los pelos, y solo en la cabeza de alguna ministra despistada).
ResponderEliminarNosotros ya hemos cambiado el "moro" por el "magrebí". Las connotaciones no son categorías gramaticales ni morfológicas, pero afectan a ambas cosas. Hay que vivir con ello. Podemos empezar una pendiente resbaladiza sin fin y cada vez más acelerados o podemos ir poco a poco. Como el límite lo marca lo que la comunidad es capaz de absorber, no creo que el resultado sea una locura. Más bien será un proceso con dudas y con algún que otro disparate que irá asentándose más o menos en una manera de hacer las cosas.
En ese futuro la gente se preguntará cómo éramos tan raros en nuestro lenguaje.
El texto de Hofstadter lo leí en su libro "Metamagical themas", que sobre todo recoge sus columnas del SA, así que supongo que sí apareció ahí.
Nunca es tarde pues siempre es hoy y después viene mañana.
ResponderEliminarSi alguna gente pide presidenta, que pida agenta de policía, la carta será urgenta y la fuerza, potenta. Por mi parte seguiré usando el español y no la jerga.
Es cierto que los idiomas evolucionan a patadas y luego se normalizan. Por ejemplo, cocodrilo es mala pronunciación por crocodilo, pero ahí sí que ya es tarde. O palabra por parabla pues deriva de "parabola" y en catalán es paraula, parola en italiano etc.
¿"Hemos" cambiado? Pues ni yo he dejado de decir moro, que significa "maurus" moreno, ni negro ni gitano lo he convertido en lo sólo más largo "de etnia gitana". En la lucha de los prejuicios contra el idioma, yo he optado por el idioma en contra de los prejuicios.
Y hoy vemos en español cómo al menos en ciertos contextos lo que hemos quitado es la connotación y no hemos necesitado ir de eufemismo en eufemismo. Obama es el primer presidente NEGRO de USA y todos tan contentos Luego resulta que sólo es medio negro, pero eso no es lo que importa sino que "negro" no tenga connotación despectiva).
En realidad "nuestro" cambio de "moro" por "magrebí" llega más lejos que el de "negro" por "afroamericano". En el lenguaje público de gente educada (por ejemplo en una conferencia o una entrevista en la tele) nadie en España dirá "moro" a no ser que hable de "fiestas de moros y cristianos" e del "romance de la reina mora". Creo que tú tampoco lo harías.
ResponderEliminarEn cambio en los EEUU se usa normalmente "black" para hablar con todo respeto del presidente. Yo he visto a muchos negros decir que eso de "African-American" es algo que no les dice nada, y que es casi insultante, como matizar que no son del todo "American", y que ellos no son africanos.
En España, en cambio, a los magrebíes sí les parece ofensivo el uso de la palabra "moro" para referirse a ellos. Puede que sea excesiva susceptibilidad (en en romance de "Abenámar, Abenámar, moro de la morería" o en el nombre "Jardín del Moro" difícilmente puede verse una connotación peyorativa), pero es lo que ha acabado prevaleciendo (tal vez porque en tiempos más recientes se haya oído más veces la expresión "moro de mierda" que los romances de frontera.
Ya, pero a "moro de mierda" le sobra el "de mierda" y no el "moro".
ResponderEliminarUn libio o un egipcio ¿también son magrebíes? Maghrib es Occidente, como en hebreo Ma'ariv. Así que un moro egipcio sería un occidental oriental.
Y el que no se llame moro porque parece un término coloquial frente a árabe o a musulmán, según los casos, es una cosa. El que sea palabra tabú es razón de más para decir MORO en el hocico de los censores del idioma.
El término para negro en EEUU ha sido curioso, pues se consideraba fuertemente despectivo "black" y se decía "negro" hasta que lo reivindicaron con lo de "black is beautiful" porque es inútio correr la carrera de los eufemismos.
En español se corrió de mongólico a subnormal -que es meramente descriptivo- pero subnormal ya resultaba ofensivo y se huyó. Siempre huyendo DE LA CONNOTACIÓN, que persigue a la idea, se la llame como se la llame.
Claro que le sobre el "de mierda", pero el daño (la connotación) está hecho. Puedes echar esa palabra en cara lo que quieras a los censores del idioma, pero ya no se la echarás a un marroquí. Si los magrebíes reivindican el "moro es bello", adelante. No los veo por la labor.
ResponderEliminarEfectivamente, huimos muchas veces de la palabra por huir de la connotación, pero así es la vida. A veces es más fácil quitar la connotación y a veces quitar la palabra. No veo mejor a priori una cosa que la otra.
Ya, pero me da lo mismo. Los gitanos hablan de payos, que me parece ofensivo, y nadie les critica por ser una de las comunidades más racistas.
ResponderEliminarSi debemos camiar nuestro idioma cada vez que alguien tiene un pero llegamos al absurdo de que rotulamos A Coruña en regiones castellano parlantes y que en Galicia se pueda rotular Castela, o Lleida en Zaragoza pero Saragossa en Lérida.
Los idiomas son códigos de signos y lo que alguno le ponga de connotación al signo no es cosa de los demás. Porque magrebí, insisto, es un término artificial, que no está basado en otro fondo cultural que el del eufemismo. Moro puede parecer medieval más que otra cosa pero a ver si los de Lepe deben cambiar su "lepero" porque tiene las connotaciones de los chistes.
A cada uno de nosotros le puede dar lo mismo o motivar una cosa más que otra, pero el lenguaje cambiará y esta será una de las razones por las que lo haga. ¿Nos oponemos a cualquier cambio? ¿A los políticamente correctos? ¿Intentamos moderar o dirigir los cambios? ¿Cada uno a su manera? ¿Con algún acuerdo tácito o explícito entre grupos e hablantes?
ResponderEliminarYo no voy a esperar a que los gitanos (quienes lo hagan) dejen de usar "payo" como término despectivo para dejar de usar "gitanada" por "traición".
En los nombres de localidades yo sería partidario de que cada una elija su nombre oficial y que ese acabe siendo el nombre con el que se la conozca en todo el mundo. De hecho ocurre así para la inmensa mayoría de las ciudades. No ocurre para las más conocidas, que tiene su nombre en varios idiomas.
En España sería partidario de usar siempre en prensa y rotulaciones Zaragoza, Madrid, Girona, en todos los idiomas en lugar de Saragossa, Madril, Gerona, aunque los hablantes sigamos siendo libres ¡cómo no! de decirlo a nuestra manera. Al cabo de algunos años Vizcaya, Gerona y Saragossa empezarán a parecer arcaicos.
Los de Lepe que hagan lo que quieran. Los fondos culturales como los chistes o los eufemismos son tan buena razón como cualquier otra para cambiar de nombre. No hay reglas fáciles que se apliquen a todo. Hay percepciones, susceptibilidades y ganas de hacer una cosa u otra.
Moro, por cierto, parece que viene del antiguo reino de los Mauri, sin tener nada que ver con "moreno". Pero el uso del lenguaje rara vez es etimológico (o lógico a secas).
Los cambios sucederán o no y en un sentido o en otro por nuestras acciones y por el resultado neto de las tuyas, las mías y las de mucha gente que ni siquiera decide conscientemente decir una cosa u otra.
ResponderEliminarLo que debes tener en cuenta es que no hay un sentido correcto de la evolución de lenguaje sino que hay opciones diferentes e incluso encontradas. La mía es dar valor de comunicación al lenguaje no sólo en la actualidad sino con el legado del pasado, lo que implica conservar en lo posible lo que tenemos sin cambios caprichosos. Cuando tú trates de proponer lo de "les vasques" encontrarás que gentes como yo te responderán que preferimos el plural clásico sin connotación de género masculino sino con indefinición de género al tratarse de un colectivo que se presume ser de ambos géneros gramaticales.
Tan esperable es que tú propongas un cambio como que yo trate de consolidar el uso recibido. Cosas de gustos.
En lo que coincidiremos nosotros dos al menos es en que o eliminamos las connotaciones despectivas mediante la educación o tenemos una serie de conflictos absurdos. Pero yo no creo que la vía para eliminar el racismo sea eliminar la palabra "negro". Quizá lo oportuno sería hacer que todos fuéramos ciegos.
En los nombres de localidades soy de una opinión distinta, no contraria. Soy partidario de compatibilizar dos cosas: acercarnos lo más posible al nombre original y respetar las peculiaridades fonéticas e históricas de cada lengua.
Por ejemplo, prefiero Frankfurt que Francfort porque lo segundo es de origen francés y Frankfurt es perfectamente pronunciable con cierto cuidado. Obviamente prefiero Londres a London y Varsovia a Varsháva y por motivos mejores cuanto menos similar sea la fonética del idioma original con respecto a la del español. Motivos histórico culturales son los que me hacen preferir Milán a Milano o Gerona a Girona, mucho más si se debe pronunciar "djirona". Recuerda que el español no es sólo cosa de España y los argentinos pueden estar muy poco interesados en las posturas nacionalistas catalanas.
Las lenguas se caracterizan por tener vida autónoma y es absurdo pretender que una lengua distinta dicte las normas de la propia. Obviamente, es oportuno no exagerar y tratar de crear diferencias artificiales o acentuarlas, como el "Madril" del vascuence. El Madrid con D es antipático incluso para la fonética española, que prefiere madrileño a madrideño por el mismo motivo que ya desde el latín se dijo "lingua" en vez de "dingua" o "lacrima" en vez de "dacruma" y que "odor" dio olor. Pero Madrid, Madrí o Madrit son perfectamente pronunciables.
Moro parece derivar del griego "mauros" o "amauros", significando negro u oscuro,
http://www.perseus.tufts.edu/hopper/resolveform?type=start&lookup=amau&lang=greek
ἀμαυρός LSJ, Middle Liddell, Autenrieth 20 20 shadowy, darkling;
ἀμαύρωμα LSJ, Middle Liddell 0 0 obscuration
ἀμαύρωσις LSJ 3 1 darkening,
http://www.perseus.tufts.edu/hopper/resolveform?type=start&lookup=mau&lang=greek
μαυρόω LSJ, Middle Liddell 40 40 to darken, to blind, make powerless
Es lo que dice el Nuevo diccionario etimológico Latín-Español de Santiago Segura Munguía (Ed de la Univ de Deusto).
De mauros o amauros que llamaron alos habitantes a reino de los Mauri parece bastante razonable.
En cualquier caso, en español, mauro vale por marrón o por moreno, el caballo de color morcillo lo es por mauricellus (DRAE) y aunque el DRAE deriva morcilla de morcón, del que no da etimología, la morcilla podría ser también de ese nombre por su color oscuro de la sangre.
Un saludo.
Los argentinos verán Girona en los mapas y pronunciarán como sepan. Como hace mucho español con nombres no castellanos o castellano antiguos que abundan en America. Es claro que aunque escritos estén todos igual, cada idioma adaptará la pronunciación a su fonética.
ResponderEliminarLa wikipedia dice esto de los moros:
http://en.wikipedia.org/wiki/Moors
y esto de Mauritania:
http://en.wikipedia.org/wiki/Mauretania
(Me fio más de la versión inglesa que de la española.)
Amoavé:
ResponderEliminarThere seems to have been some confusion about the relationship of the word moro/mouro to the word moreno (which means brown), both from Greek maúros, i.e. black. However, the two words have different etymological roots.
both from Greek maúros, i.e. black.
However, the two words have different etymological roots.
O sea, en español, porque lo digo con más gracia: que ambos proceden de la misma raíz mauros pero tienen diferentes raíces etimológicas.
Bienvenido al mundo real de los escritores de la Wiki.
Lo que no acabo de entender es por qué las palabras neutras algunos tratan de dividirlas en sexos (como en el caso de presidente). Cuando precisamente de lo que nos quejamos es de que haya división por sexos.
ResponderEliminarLo ideal sería que salvo las palabras hombre y mujer las demás palabras fueran neutras (como en inglés). Puedo entender lo de alumnos y alumnas (prefiero alumnes) pero no entiendo que las palabras neutras estén sufriendo un dimorfismo sexual. ¿hay que insistir siempre en dividirlo todo en sexos? Me parece una actitud sexista.
Las dinámicas que conforman la evolución de una lengua en muy poca media están determinadas por lo que podamos pensar que es lo racional. Si la palabra "presidente" está socialmente asociada con hombres presidentes a pesar de que morfológicamente sirva para ambos sexos es normal que una dinámica evolutiva lleve a la creación de "presidenta" en cuanto hay una mujer que lo es.
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