Hace un tiempo tuití sobre el libro Sapiens, de Harari. Recojo el hilo para que no se me pierda. Es de estos libros explicatodo, de los que hablé en alguna ocasión. Confieso que lo leí solo porque me lo regalaron por Reyes, no porque estuviera en mi lista de lecturas. Ya sé que voy con años de retraso, pero aquí van mis impresiones. No todas, solo 20.
1. El libro es un excelente resumen de la historia de la humanidad, con sus restricciones y motivaciones.
2. La parte descriptiva se corresponde, hasta donde sé, con las últimas investigaciones.
3. En lo que toca a las motivaciones de los Sapiens (así nos llama a los especímenes del Homo sapiens), Harari hace hincapié en la fuerza de las ideas.
4. Las ideas son fruto de la imaginación de los Sapiens. Todas: religiones, ideologías, artes y ciencias, entre otras.
5. Las ideas que prevalecen en una sociedad en una época explican muchas de las acciones tomadas en esa sociedad.
6. No objeto eso, pero echo en falta alguna discusión sobre el carácter de las distintas ideas.
7. Primer ejemplo: los dioses y el dinero son ideas y, ciertamente, mueven voluntades. Sin embargo, dios solo está en la mente y no es cierto que el dinero esté solo en la mente.
8. Una vez pensada y aceptada la idea de que tal cosa es dinero, esta responde objetivamente a la idea que se tenía. Eso no pasa con los dioses. Mientras los Sapiens creían en que tal cosa era dinero, efectivamente lo era. Cuando creían en tal dios, ese dios no era.
9. Puede que para algunas cosas la diferencia no sea importante, pero para otras sí lo será. ¿No hay una tendencia en la historia presente a que prevalezcan unas sobre otras?
10. Segundo ejemplo: las distintas ideologías. Leyendo a Harari parece que todo es elegir entre ellas según nuestro gusto si es que tal cosa podemos hacer; o aceptarlas como parte de nuestra cultura si nos hemos adoctrinado en ellas.
11. No hay ni un párrafo para discutir posibles diferencias en cuanto a su coherencia con la realidad, en cuanto a las contradicciones sociales que generan o cualquier otra diferencia de interés. ¿Carece esto de importancia para describir por qué estamos donde estamos?
12. Tercer ejemplo: la ciencia. Mi objeción es como las anteriores, pero todavía más marcada.
13. ¿Importan estas diferencias para el discurso de Harari? Creo que sí. Como he dicho, es cierto que la creencia en una religión frente a la ciencia pueda generar dinámicas sociales que no dependen de la verdad de una u otra; pero habrá otras dinámicas que sí dependan de ello.
14. No solo eso. En el final del libro y a la luz de todo el poder tecnológico, científico, político, etc. que hemos conseguido los Sapiens, Harari nos propone como cuestión principal no el qué queremos hacer con todo ello, sino el qué queremos querer.
15. Es decir, tenemos que plantearnos bien las preferencias antes de seguirlas. Por ejemplo, cuánto de conectados queremos estar con nuestras emociones biológicas.
16. Pues bien, para esto último importa todavía más el distinguir las distintas características de las ideas.
17. P.ej.: algunas ideologías dan lugar a sociedades donde es difícil un debate sobre lo que queremos, mientras que otras permiten que afloren las querencias, se discuta sobre ellas, sus limitaciones, contradicciones y las restricciones tecnológicas, científicas y de toda índole.
18. Es decir, siguiendo la lógica de Harari, la pregunta a la que llevaría haber hecho estas distinciones no sería qué queremos querer, ya que eso no lo sabemos, sino, en qué tipo de sociedad, con qué ideologías, se llevará a cabo ese debate.
19. Y esa, señoras y señores, es la pregunta que creo debe hacerse.
20. Y la respuesta no es elegir entre las ideologías según me gustan o me adoctrinan, sino según sus propiedades más objetivables respecto a si permiten o no el debate.